“Yo pasé un año viviendo en un carro, manejando 72 mil kilómetros por todo Estados Unidos. Trabajé con un grupo llamado The Odyssey, y nuestra meta era contar la historia de la gente.”

Esta es apenas una de las múltiples experiencias de Stephanie Elizondo que develan mucho de su trabajo como cronista y de su personalidad. Stephanie Elizondo Griest (6 de junio de 1974, Texas, Estados Unidos) es una escritora de viajes, periodista y activista estadounidense. Ha trabajado para diversos medios, como The New York Times y The Washington Post. Además, ha publicado tres libros: Around the Bloc: My Life in Moscow, Beijing, and Havana; 100 Places Every Woman Should Go; Mexican Enough: My Life Between the Borderlines.

Ella visitó recientemente la UCAB, invitada por la Escuela de Letras con el apoyo de la Embajada de Estados Unidos, para que compartiera su experiencia con los alumnos. «Meditación expectante» llama ella a su método de trabajo. Cuenta que consiste en pasar horas en la calle, en un café o en una esquina esperando que algo suceda. Estar siempre alerta al entorno, e incluso a veces provocar el acontecimiento que dé pie a una situación interesante.

Pasé nueve meses viviendo en China antes de poder tener una conversación normal con alguien. Cuando viajas, tienes que dejarles claro a las personas que no sabes nada y tienes que aprender a preguntar lo que quieres saber, así sea incómodo. La experiencia puede llegar a ser alienante. Suelo pasar al menos un año en un país antes de escribir sobre él. Las personas son las que les dan vida a los lugares, al igual que todo objeto posee una historia.

Su escritura se desarrolla dentro del género de la no ficción, conocido en Latinoamérica como crónica. Esto quiere decir que las técnicas narrativas no escapan de su escritura. Utiliza los variados recursos literarios de la ficción, aplicándolos a situaciones de la vida real. Todo aquello que hace que una novela sea genial: personajes, tramas, estructuras que burlan la concepción lineal del tiempo, diálogos que forman parte de su creación literaria y periodística; intentando crear arte a partir de la vida real. En línea con su trabajo como escritora de viajes, es importante resaltar la tradición literaria de Estados Unidos del road trip, o viaje de carretera. Escritores que producen literatura a partir de sus experiencias a través de las carreteras y pueblos, utilizando también el viaje como metáfora, siendo herederos de un argumento que se remonta a La Odisea homérica. Elizondo menciona algunos escritores que le sirven de inspiración: Jack Kerouac, Ernest Hemingway, John Steinbeck y Paul Theroux.

EL VIAJE DEL HÉROE Joseph Campbell, escritor y estudioso de la literatura de origen estadounidense, identificó un patrón narrativo en las historias épicas, mitos y leyendas populares, basado en una estructura de viaje. Explicado en su libro El héroe de las mil caras, ha servido de guía e inspiración para muchos autores, ampliamente utilizada en novelas y películas como las sagas de Star Wars y Matrix. En su teoría, el héroe es sacado de su contexto natural, llamado por la aventura que lo lleva a realizar un viaje tanto físico como psicológico. La escritora estadounidense se remite a esta teoría tanto en su producción literaria como en su forma de vida.

Cuando viajas, es cuando descubres quién eres realmente, y lo que de verdad te importa. En el camino, tus sentidos siempre están alerta. En un momento de mi vida pensé que solo estaba viva cuando estaba en la carretera, y mi meta ahora es hacer que el mundo sea mi carretera. Me gusta acercarme a cualquier experiencia de la vida como si fuese un viaje. Es fácil ser sincero y abierto en las calles de Marruecos, ¿pero puedo ser así en mi hogar y en mi lugar de trabajo?

♦ Emmanuel Ferreira