¿Cómo no perder la fe en el país? ¿Cómo seguir creyendo que puede haber una salida a las penurias que se viven diariamente en Venezuela? Para algunos puede ser muy difícil, quizás imposible. Sin embargo, tal como indica el mito griego de la caja de Pandora: la esperanza es lo último que se pierde.

El 13 de enero, la universidad celebró un encuentro llamado Retos de la educación en el siglo XXI, en el que los participantes pudieron ser testigos de diversas presentaciones sobre la educación en Venezuela. Uno de estos ponentes— el último de la jornada, para ser precisos— fue el Dr. Germán García Velutini, presidente del Banco Venezolano de Crédito, quien hace poco menos de ocho años fue secuestrado para ser liberado casi un año después.

Desde su experiencia en esta terrible situación por la que, lamentablemente, ha pasado una alarmante cantidad de venezolanos, dio motivos para mantener la esperanza en la educación en Venezuela. «¿Debemos quedarnos o irnos de Venezuela’», se planteó al inicio de su ponencia. El abogado y empresario García Velutini expresó que esta es una decisión personal que no se debe criticar. Sin embargo, resaltó que se «debe mantener la esperanza de hacer un futuro mejor donde sea».

 

LA IMPORTANCIA DE LA EDUCACIÓN

García Velutini, aunque no es educador, «se siente parte del sistema». De hecho, es miembro de la junta directiva de Fe y Alegría. Para él, es importante mantener una labor sin dejar de hacer servicio público. Asimismo, se dirigió hacia los docentes presentes en el auditorio y les recordó que son «quienes están educando al futuro de Venezuela». Por otra parte, hizo énfasis en que todos tienen una responsabilidad en la vida.

Según García Velutini, el sistema educativo venezolano ha sido sujeto de humillaciones. Además, considera que la educación es la profesión más importante para el desarrollo de un país. «Hay que derrotar la percepción que se tiene sobre los maestros en Venezuela. Todos hacemos falta en el país. Ustedes hacen falta», dijo dirigiéndose a los docentes.

Patricia Graziani


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