La universidad es la casa para desarrollarse en todos los ámbitos. Esto incluye el crecimiento personal y el social, además del académico.

Es por esto que, mientras se está en la etapa universitaria, los jóvenes no solo deben quedarse con lo que obtienen en el aula, sino aprovechar lo que pueden aportar las actividades extracurriculares y la experiencia de la vida en el campus.

En la UCAB, hay muchas opciones para que los estudiantes hagan esto realidad. Una de ellas tiene que ver con el desarrollo deportivo. 

 

La Católica cuenta con una dirección especialmente dedicada al tema, Deportes UCAB, la cual promueve  el crecimiento personal  a través del entrenamiento en disciplinas como rugby, fútbol, voleibol y básquetbol, tanto para hombres como para mujeres.

(VIDEO: Haz deporte en la UCAB)

Juan Juárez, estudiante del séptimo semestre de Comunicación Social, es integrante de Fútbol UCAB. Para él significa mucho pertenecer al equipo pues siente que lo ha ayudado a crecer y a lograr muchas metas.

 

“La UCAB es mi segundo hogar. Aquí he conocido a mis mejores amigos y he pasado muchos de los mejores momentos en ella. La universidad hay que vivirla e ir más allá de un salón de clases porque puede ser lo mejor de tu vida”

En el ámbito cultural está Cultura UCAB,  dirección a la que se encuentran adscritas  agrupaciones como Teatro UCAB, el Cine Club, la Coral UCAB, Narracuentos, Danza UCAB, Círculo de Lectores, Geek Club y la Fundación Medatia; todas dispuestas para la expresión juvenil a través de las artes.

 

 

Carlos Acosta, integrante de Teatro UCAB, cuenta que vivir la universidad como lo hace no tiene precio pues es una experiencia única e inolvidable.

“En el teatro me han brindado herramientas para enfrentar la vida en todos los sentidos y gracias a él también he aprendido a conocer mejor la realidad en la que estamos inmersos. Aquí puedo expresarme y todos pueden hacerlo. El teatro y la UCAB en general son mi hogar».

 

Pero no solo hay alternativas recreativas. Esta universidad también cuenta con grupos de debate y modelos de organizaciones como Naciones Unidas  que ponen a prueba a los estudiantes en el ámbito intelectual.

En la lista se encuentran las delegaciones NMUN, HNMUN, WorldMUN, LAMUN, MOIT y Sociedad de Debate, muchas de las cuales han obtenido premios en concursos nacionales e internacionales. 

(Ver también: La UCAB hizo historia en el Modelo de Naciones Unidas)

 

 

Para participar en estas organizaciones, el aspirante debe pasar por un proceso de selección donde se evalúan las capacidades que posee. 

En estos grupos o selecciones, el ucabista fortalece conocimientos en su área de especialidad y aprende  otras cosas que le servirán para su vida personal y profesional.

Diana Martínez, cursante de  5to semestre de Comunicación Social, ha formado parte activa en muchas agrupaciones juveniles, entre ellas  NMUN, organización que representa a la universidad en las competencias del National Model United Nations, el modelo de Naciones Unidas más antiguo del mundo.

Para Martínez, la delegación se convirtió en su familia, en la forma de expresarse y de mostrar la excelencia ucabista a nivel internacional.

«La universidad es el lugar ideal para el aprendizaje y la diversidad. La Universidad Católica Andrés Bello te incentiva a ir más allá del salón de clases y la esa es la idea, no solo aquí sino en todas las universidades, siempre ir más allá y nunca dejar de crecer»

Las agrupaciones que se dedican a la acción social en general también forman parte del campus, pues hay muchas opciones de voluntariado que incluyen a los de las distintas escuelas (VOLCOS, VOLET, Psicovoluntariado, entre otros) y las que han sido creadas por estudiantes con fines humanitarios.

 

 

Un claro ejemplo es Arepazo Ccs, un grupo destinado a realizar jornadas de alimentación a personas que se encuentran en situación de calle en la ciudad capital.  Participar en estas iniciativas puede ayudar al alumno a ampliar su visión de la vida y a conectarse más con la realidad de su entorno y con las personas que lo rodean.

Otro ámbito en el que un estudiante puede interesarse y desenvolverse es el de la política universitaria, porque puede participar en las distintas gestiones de los centros de estudiantes, consejos de Escuela, Facultad, Desarrollo Estudiantil y Consejo Universitario.  En la UCAB, cada año los alumnos  eligen a sus representantes democráticamente y cualquiera puede postularse a estos cargos, siempre y cuando tenga la visión y el compromiso de servir a los demás.

 

 

Stephanie Pérez, miembro del Centro de Estudiantes de Comunicación Social, da fe de lo que se puede lograr.  Para ella la universidad  es el espacio ideal para crear los enlaces que ayudarán a tener éxito en un futuro. 

«Mi experiencia en la representación estudiantil ha sido gratificante. La universidad hace mucho por mí y pienso que la mejor forma de retribuírselo es trabajando por ella y aportando mi granito de arena».

 

Aprender otras lenguas dentro del campus también es posible, de la mano del Centro para el Desarrollo de Lenguas Extranjeras (CDLE), que promueve el buen desenvolvimiento de los alumnos en distintos idiomas.

Durante el año, el CDLE organiza talleres, conferencias con expertos y clubes de conversación, y además cuenta con enlaces con el Wall Street English, el Centro Venezolano Americano y el Goethe Institut, entre otros.

Los interesados pueden contactar al CDLE vía telefónica a través del 0212-407.4111, dirigirse a su oficina en el Edificio de Aulas, Módulo 1, piso 5 o visitar su blog aquí.

Como puede verse, el espacio universitario ucabista está hecho para todas las personas, es universal e inclusivo, por lo que para aprovecharlo al máximo solo hay que ver más allá, indagar e intentarlo.

Y es que vivir la UCAB es formar parte activa de ella, porque no es lo mismo ser ucabista que estudiar en la UCAB.

Quienes deseen obtener más información sobre cualquier agrupación juvenil pueden ingresar al portal Vida UCAB, creado por estudiantes e impulsado por la Dirección de General de Desarrollo Estudiantil.

♦Texto: Katherine Rodríguez/Fotos: Aura García y archivo