Este martes 15 de enero, se realizó en el auditorio Hermano Lanz de la Universidad Católica Andrés Bello el foro «Panamazonía, desafíos y esperanzas», organizado por la Red Eclesial Panamazónica de Venezuela (REPAM-Venezuela) la cual convocó a varios especialistas para hablar sobre la realidad de este vasto territorio y los peligros que está enfrentando debido a la explotación de sus recursos naturales.  

A través de distintas ponencias, se explicaron las características de la zona y sus comunidades, los conflictos actuales y los esfuerzos que están adelantando la iglesia católica y organizaciones de la sociedad civil, para combatir la explotación indiscriminada de los recursos naturales.

En el marco de este evento, El Ucabista entrevistó a monseñor José Ángel Divasson, presidente de REPAM-Venezuela, quien reiteró las acciones que viene emprendiendo la iglesia católica en defensa del medioambiente y de las comunidades indígenas que habitan esta región.

«Hay una preocupación total por la explotación que se está haciendo de la naturaleza. Es algo en lo que coincidimos los miembros de la REPAM en todos los países. Hay un extractivismo que no tiene en cuenta para nada a nuestros pueblos indígenas, que se lleva por delante el futuro de esta gente que ha vivido por siglos esa región y que se está viendo obligada a irse no sé para dónde, porque los espacios que ocupan son objeto de explotación indiscriminada de recursos».

El sacerdote enfatizó que, en el caso venezolano, la mayor destrucción está siendo generada por la política minera impulsada por el Estado en los estados Amazonas y Bolívar.

«Son más de 30 etnias indígenas (20 en Amazonas y  entre 15 y 16 en Bolívar) las que se están viendo duramente afectadas por esta situación, porque aunque se diga que hay orden, no hay normativa de explotación, no hay minería sustentable, sino una que destruye todo a su paso, porque es una minería no profundidades sino a flor de tierra.  Cuando uno va a Yapacana, en Amazonas, por hablar de un caso, hay que ver cómo se está destruyendo la naturaleza, la minería está contaminando los ríos, se están tocando importantes fuentes de agua y eso generará grandísimos problemas en el futuro».

Divasson afirmó que esta problemática no es exclusiva de Venezuela y se extiende a diversos países de Latinoamérica,  donde es común la práctica de técnicas no sustentables y la consecuente destrucción de territorios vírgenes.

«Esto es un asunto que se repite en todos los lugares de la Amazonía. En Brasil se ve mucho lo que es agricultura no sustentable, que destruye selvas inmensas por plantaciones de soya y palma africana. En Ecuador, la explotación de petróleo está contaminando decenas de ríos, igual que en Perú».

El sacerdote aseguró que la  REPAM realiza grandes esfuerzos por contribuir con las comunidades indígenas que hacen vida en el Amazonía.

«Hay una presencia permanente en todas estas naciones. La Iglesia siempre ha trabajado para la defensa de los pueblos indígenas y la creación de la REPAM es una muestra de ello, ya que todos los esfuerzos que se hacían  estaban un poco dispersos. Con esta red buscamos hacer más cosas en conjunto, porque eso permite tener mayor efectividad. La iglesia católica tiene el compromiso firme de apoyar a estas comunidades que sufren y buscan soluciones a sus problemas. Nosotros queremos ser aliados de ellos».

El presidente de la red agregó que la colaboración con diversas organizaciones civiles ha sido clave para lograr avances en el trabajo de observación y denuncia de la situación. 

«Hay muchas organizaciones civiles que trabajan con nosotros y es de nuestro interés que nos relacionemos con ellas también, precisamente por eso somos una red. No hay uno que se lleve el protagonismo;  entre todos unimos esfuerzos y buscamos la manera de que se vayan conectando para generar soluciones».

La Red Eclesial Panamazónica es una instancia cofundada en 2014 por varias instancias regionales y nacionales de la iglesia católica que hacen vida en nueve países de Suramérica, incluyendo Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Guayana Francesa, Perú, Surinam y Venezuela.

 La REPAM promueve la concientización de la sociedad civil en la promoción del desarrollo sostenible y la ecología integral, y trabaja de la mano de organizaciones académicas y de derechos humanos en el acompañamiento y defensa integral de territorios y grupos vulnerables de esta región. 

Para más información sobre la REPAM está disponible su página web http://redamazonica.org/

♦Texto: Lesslie Mendoza/Fotos: Aura García