Desde hace seis años se realiza el Encuentro con la Ciencia en el campus Montalbán. Está dirigida por Proyecto Liceos de la UCAB (perteneciente a la Dirección de Proyección y Relaciones Comunitarias) y reúne a 250 estudiantes de bachillerato de liceos de Antímano. El objetivo es enseñar a los jóvenes matemática, química, física y robótica, y así incentivar el conocimiento e interés por la ciencia.
Esta actividad permite que alumnos de la Católica ayuden a los liceístas a presentar proyectos científicos que son exhibidos en la universidad y, desde 2013, también en la plaza Bolívar de Antímano. Este año se realizó una nueva edición, donde se fortaleció el vínculo entre los alumnos universitarios y de bachillerato, estos últimos se quedaron con el gusto por la ciencia, algunos, incluso, ya planean estudiar Ingeniería.
SIN GASOLINA ES MEJOR
Génesis Fernández, Xavier Díaz y Yusleidy Vanegas, estudiantes de bachillerato, se dirigían a la comunidad de Antímano a realizar un trabajo, cuando el Jeep en el que se transportaban se quedó sin gasolina, teniendo que terminar su recorrido a pie. Después de esta experiencia, se preguntaron: ¿qué pasa si se acaba el petróleo, así como se agotó la gasolina?
Tiempo después, cuando se acercaba el Encuentro con la Ciencia de la UCAB, le hicieron ese mismo cuestionamiento a su facilitador, Gustavo Lara, estudiante de séptimo semestre de Ingeniería Informática, así que los llevó a un taller de energía renovable. Los adolescentes quedaron maravillados y con muchas ganas de participar en la feria.
Génesis Fernández explica:
La idea surgió como una iniciativa de querer hacer algo para el futuro, un carro que no necesite de combustible fósil.
Durante tres semanas consecutivas, se reunían todos los sábados de 8:00 am hasta las 12:00 pm en la universidad. Se creó un plano y se dividieron las tareas para ahorrar tiempo. El Parque Social Manuel Aguirre, en conjunto con el Centro de Tecnología Educativa de la Escuela de Educación (CETED), les facilitó el set de legos con el que armaron su carro impulsado por energía solar, este fue modificado tres veces hasta cumplir con sus expectativas. Uno de esos cambios surgió por la nubosidad que había cuando se estaba probando, así que ingeniaron un sistema a través de condensadores para almacenar la energía solar.
El jueves 4 de junio mostraron su capacidad para crear y descubrir, con su participación en el Encuentro con la Ciencia de la UCAB. Tres jóvenes orgullosos de su trabajo y esfuerzo, vestidos con sus uniformes de liceístas y una sonrisa en sus rostros. El grupo presentó su creación y maravilló a padres, estudiantes y profesores con su explicación y gran manejo de la ciencia. Un carro armado con legos que al colocarse en el sol se desplazaba sin ayuda de un combustible fósil.
La experiencia de estos jóvenes fue enriquecedora y de crecimiento. Es la tercera vez que Xavier Díaz participa en esta iniciativa, que reúne a alumnos de colegios de Antímano y de la universidad:
Me alegra poder crear algo para ayudar en la vida, una propuesta que sé que servirá a futuro.
Sus constantes participaciones hicieron que Díaz consiguiera su vocación, ya que quiere estudiar Ingeniería en la Católica, para encontrar una forma de ayudar a su país y al mundo.
SONRISAS HOMOGÉNEAS Y UN PUENTE COLGANTE
El grupo de la estudiante de octavo semestre de Ingeniería Informática Juneth Molina llamó la atención del público en el séptimo Encuentro con la Ciencia, su propuesta es singular: crear un puente que se pueda mover con la fuerza de la energía hidráulica.
El concepto se le ocurrió a Molina, pero lo puso en práctica con la ayuda de los alumnos de bachillerato Ariadne Rodríguez, Flor Espejo, Yusbely González, María Fernanda Rojas, Alcides Salinas, Caridad Villamizar, Ena Camao y Génesis Castillo. Todos ellos se reunieron durante cuatro semanas para armar y darle forma al proyecto. En el fondo, el propósito es crear una alternativa vial para el país.
Hubo dos retos para hacer realidad este invento: el primero era crear un molino de agua, pero debido a la falta de cuchillas se tuvo que modificar el concepto. El segundo fue lograr que este numeroso equipo se pusiera de acuerdo; por suerte, con la orientación de su facilitadora y la disciplina del grupo, se logró un trabajo excelente. Génesis Carrillo expresa:
La rampa es una idea original, gracias a que mientras un barco se desplaza por abajo, por arriba están circulando los coches.
Al inicio de la experiencia era un grupo heterogéneo que, con cada día de trabajo y aprendizaje, se volvió más homogéneo. El día de la presentación a la comunidad universitaria se encontraban en total nueve sonrisas, orgullosas del arduo trabajo y dedicación. En su mesa se apreciaba el flujo del agua, el movimiento de las piezas y la circulación de los vehículos. Una maqueta adornada para acercarse lo más posible a la realidad venezolana.
Es la primera vez que este grupo participa en el encuentro científico, pero esperan asistir el año próximo. La experiencia estuvo llena de aprendizaje, trabajo en equipo, disciplina y mucha dedicación. La inclinación hacia la ingeniería por parte de este grupo era notoria, ya que todos quieren especializarse en alguna área. Alcides Salinas anhela estudiar Ingeniería Industrial en esta casa de estudios, porque le gusta la universidad y, en un futuro, espera generar sonrisas y alegría a su país.
♦ Luis E. Martínez