Han pasado dos semanas desde que Francisco Márquez y Gabriel San Miguel fueron detenidos en el peaje de Apartaderos, ubicado en el estado Cojedes. Francisco tiene 30 años y Gabriel tiene 24, los dos son abogados de la república, dirigentes del partido político Voluntad Popular y jóvenes que luchan día a día por superar las adversidades que impone el modelo político que se ha implantado en Venezuela.
Ambos han pasado por las aulas de esta universidad: Márquez cursó su carrera de pregrado en la Católica y fue parte de la primera generación de estudiantes que conformó el Movimiento Estudiantil Venezolano, durante las protestas de 2007 contra el cierre de RCTV. Compartió entonces consignas de apoyo junto a Yon Goicoichea, Freddy Guevara y David Smolansky, hoy en día alcalde de El Hatillo, y junto a quien trabaja actualmente como jefe de Despacho.
Sumado a esto, Francisco realizó el Máster de Políticas Públicas en la Escuela de Gobierno, John F. Keneddy (Universidad de Harvard) y, antes de formar parte del equipo de Smolansky, fue consultor en la firma McKinsey & Company y luego coordinador de Proyectos Especiales en la gobernación de Miranda.
Gabriel, por su parte, se formó en las aulas de una de las principales universidades autónomas del país, la Universidad de Carabobo, y egresó en 2015. Formó parte de Lidera, programa de formación para líderes auspiciado por el Instituto de Estudios Superiores de Administración (IESA), la UCAB y la Universidad Metropolitana. Posteriormente apostó por cursar la maestría en Derecho Constitucional que ofrece la UCAB. Actualmente se desempeña como asesor del Despacho de la alcaldía de El Hatillo.
Ambos fueron detenidos el 20 de junio cuando se dirigían a apoyar el proceso de revalidación de firmas a favor de un referéndum revocatorio en contra del presidente Nicolás Maduro y han sido acusados de legitimación de capitales. Supuestamente, las autoridades hallaron 2 millones 990 mil bolívares en su poder más folios y volantes del partido Voluntad Popular, la Mesa de la Unidad Democrática y del líder Leopoldo López (teóricamente, esto sería utilizado por el Gobierno como instigación a delinquir, aunque suene absurdo).
La jueza que lleva el caso asignó como lugar de reclusión el estado Cojedes durante los primeros 45 días. Sin embargo, el pasado jueves 23 de junio, fueron ingresados a la cárcel de presos comunes 26 de Julio, en San Juan de Los Morros, estado Guárico.
La UCAB emitió un comunicado de protesta y rechazo ante estas detenciones a las cuales califica de ilegales.
En la foto: Francisco Márquez y Gabriel San Miguel, en el momento de su detención en el estado Cojedes.