En todo amar y servir. Es esta máxima ignaciana la que ha marcado el trayecto que ha recorrido hasta ahora la UCAB. Puede resultar fácil de decir, pero es algo que va más allá de una frase. El compromiso social que tiene la universidad se manifiesta a través de Extensión Social. Pero esto no es un departamento más de la universidad o un complemento; es parte sustantiva de ella y de su sentido como institución.
«La universidad no es un claustro que vive para sí, aislada del mundo que la rodea, empeñada en sus propios fines de formación profesional, independientemente de las circunstancias que la rodean».
En esas líneas se resume el sentido de compromiso social de la UCAB. La formación académica es esencial, claro, pero debe ir acompañada de una formación humana que permita a los futuros egresados sensibilizarse más y sentir curiosidad por el entorno que los rodea.
En 2015 se publicó el Plan Estratégico de Extensión Social, en el cual se refleja cómo el trabajo social y comunitario de la universidad se ha cohesionado y sistematizado en un gran proyecto. Ahora todos los servicios de la extensión social se hallan bajo este mismo plan.
En este mismo informe se aclaran algunos de sus objetivos: «Fortalecer la relación de la universidad con las comunidades, desarrollar en los estudiantes un sentido de responsabilidad social, contribuir con la solución de los problemas en las comunidades y analizar y explicar la problemática social […] de estas».
Mediante distintos servicios, programas y proyectos, la Católica pone los conocimientos, talentos y recursos de su gente a disposición de las comunidades con las que trabaja. Todos los trabajadores y colaboradores creen en el desarrollo de una conciencia crítica.
SERVICIOS PARA LA COMUNIDAD
La UCAB cuenta con el Parque Social P. Manuel Aguirre para alcanzar una gran parte de sus metas en cuanto a compromiso social. Es este el lugar en donde la comunidad universitaria se encuentra con las comunidades externas. Desde Parque Social se desarrollan ejes de acción en distintos ámbitos. Por ejemplo, el área de pedagogía y educación, ofrece el programa Olimpíadas de Lengua y Matemática, que tiene como fin promover el desempeño académico exitoso y actualizar a los docentes de estas áreas. Entre 2013 y 2014, hubo un total de 2.000 beneficiarios directos.
En el área de salud, otro ejemplo, existe el programa diferenciado de orientación en salud sexual y reproductiva Tú Decides. Tiene como fin promover una salud sexual sana en jóvenes para prevenir el embarazo adolescente y enfermedades de transmisión sexual. Además, prestan servicios de consulta ginecológica y urológica.
En el área de psicología hay distintos servicios y programas. Uno de ellos es el programa de Desarrollo Integral y Habilidades para la Vida; su principal objetivo es fomentar el desarrollo integral de los niños mediante intervenciones psicológicas acordes a los contextos escolares y comunitarios.
Asesoría jurídica, por otra parte, tiene el Servicio Jurídico Gratuito para facilitar el acceso a la justicia a individuos de los estratos sociales más bajos. Entre 2015 y 2016, se estima que hubo un aproximado de 7 mil beneficiarios directos. Este número, cabe destacar, se multiplica significativamente cuando se evalúa el número de beneficiarios indirectos: en este período, casi 29 mil.
ALIADOS FUNDAMENTALES
Este trabajo es de muchos, dentro y fuera de la universidad. Los estudiantes y profesores, por una parte, cumplen un papel fundamental para poder llevar a cabo las actividades de Extensión Social. Son ellos principales voluntarios que permiten que los proyectos, programas y servicios se desarrollen.
Por otra parte, están las distintas organizaciones e instituciones dentro de las comunidades. Ayudan a que el trabajo de conocer a la gente dentro de ellas, sus costumbres, preocupaciones y sueños sea más llevadero y posible.
Las fundaciones, empresas y organizaciones tienen un papel tremendamente esencial para hacer posible mantener en pie todos los proyectos de Extensión Social. Desde 1999, año en el que fue inaugurado el Centro de Salud Santa Inés (CSSI), distintos entes se han interesado en aportar fondos para el mantenimiento, la expansión y la remodelación de las instalaciones. Entre 2013 y 2014 fueron unos diez donantes los que colaboraron con la remodelación e instalación de nuevos equipos en el tomógrafo helicoidal.
Por supuesto, esto no es un regalo al azar. Los distintos aportadores invierten en estos proyectos porque han visto los frutos que traen. Además, reciben informes sobre qué es lo que se ha realizado con el dinero que han donado.
Otros aliados que merecen ser mencionados son los médicos del Programa Apoyo al Paciente. Una de sus tareas consiste en establecer convenios con distintos médicos de áreas que no se encuentran y ellos otorgan un número de consultas gratis al mes para aquellos pacientes que sean referidos desde el CSSI.
«Cuando vienen pacientes buscando atención en algún área con la que no contamos acá, nos preocupamos en cómo podemos ayudarlos. Así que estos convenios con médicos solidarios nos permiten ayudar a estas personas que necesitan atención médica», comenta Mariana Borges, directora adjunta del CSSI.
¿QUIÉNES SON LOS BENEFICIARIOS?
Una gran parte de los beneficiarios pertenece a comunidades aledañas a la universidad. Personas de bajos recursos acuden todos los días a buscar ayuda en alguna de las distintas áreas de Parque Social, o que son parte de los proyectos que se dirigen directamente hasta los sitios de acción social.
La gente de Antímano, Carapita y La Vega es la más recurrente. Sin embargo, hay iniciativas en distintas zonas de Caracas: San Agustín, Las Mayas y Telares de Palo Grande (Caricuao) son algunas de ellas.
Son comunidades bastante amplias. En 2009, sólo en Antímano había un aproximado de 153 mil habitantes y en La Vega unos 145 mil.
Es importante destacar que todos los servicios están abiertos y a disposición de cualquier persona que los necesite, sea de donde sea.
LOS NUEVOS PROYECTOS
Los proyectos evolucionan con el tiempo y a la par de las necesidades de las comunidades. Actualmente, en el área de Proyección Comunitaria, se trabaja en el fortalecimiento de la organización comunitaria y del tejido social.
«Mientras las comunidades tengan mayor organización, más liderazgo y trabajo en pro de la comunidad, y si sus organizaciones fortalecen su trabajo en conjunto, ese entramado de relaciones y vínculos se fortalecen y traen beneficios muy importantes», asegura Adle Hernández, directora de esta área.
Hernández también comenta que «cada comunidad es única» y considera que «a veces podemos aprender mucho más de ellas de lo que uno piensa».
De eso se trata Extensión Social. Conocer, aprender y ayudar de forma paciente, constante y con vocación es la clave. Cualquiera que así lo desee puede ser parte de esta política ucabista y contribuir a cambiar para bien la vida de muchos.
♦ Patricia Graziani