Se dirigió a la puerta y encontró una carta sellada por el Ministerio. La abrió y recibió la fatal noticia: ahora, su personalidad era propiedad del Estado.
♦Antonio Frangie Mawad
Publicado por Efraín Castillo | Dic 15, 2016 | VIDA UNIVERSITARIA | 0 |
Se dirigió a la puerta y encontró una carta sellada por el Ministerio. La abrió y recibió la fatal noticia: ahora, su personalidad era propiedad del Estado.
♦Antonio Frangie Mawad