El 21 de diciembre es famoso por el Espíritu de la Navidad. Esta fecha realmente significa la llegada del solsticio de invierno, momento en el cual el planeta tierra se encuentra más alejado del sol.
Sin embargo, muchos años atrás los pueblos nórdicos y celtas, con sus sacerdotes llamados druidas, realizaban rituales en estas fechas para invocar a las fuerzas de la naturaleza. Cada equinoccio o solsticio practicaban la misma costumbre, celebraban junto a las maravillas que le daba la madre naturaleza y le hacían peticiones a sus dioses.

LA LEYENDA DEL ÁNGEL URIEL

Existió un ángel llamado Uriel, que cuenta que el Espíritu de la Navidad proviene de una galaxia lejana que entró al planeta y se posicionó en el la región norte, mejor conocida como la península escandinava.
El Espíritu de la Navidad es entendido no como una persona, sino como una energía proveniente del centro del sistema estelar, que trae aquello imprescindible para los seres humanos, desde el amor hasta la paz.

RITUALES NAVIDEÑOS

Las familias suelen limpiar las casas a fondo para eliminar las energías negativas acumuladas durante el año. Encienden velas e incienso, colocan mandarinas en las mesas y escriben en una lista los deseos para el nuevo año, luego prosiguen a quemarlas.

♦ Katherine González