El 1 de marzo se celebra el Día de la Cero Discriminación; declarado por la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) el 1 de diciembre de 2013.
La ONU define a la discriminación como “cualquier acto o comportamiento que tiene por objeto o resultado la violación de los derechos humanos fundamentales que todas las personas disfrutan en pie de igualdad”.
Por su parte, el derecho a la no discriminación implica que todas las personas merecen un trato digno, al igual que el respeto a su humanidad, autonomía, confidencialidad, privacidad, igualdad, etc.
¿Qué representa?
El Día de la Cero Discriminación se enfoca en representar una oportunidad para que todas las personas del mundo levanten su voz para luchar contra la discriminación. La ONU, y más específicamente ONUSIDA, quiere recordarles a todas las personas que sus talentos y competencias valen y son importantes para hacer un cambio.
Esta organización, cuando habla de la discriminación indica que:
Nadie debería ser discriminado debido a su género, identidad de género, raza, edad, discapacidad, origen étnico, orientación sexual, religión, lengua, condición médica o cualquier otro motivo
La discriminación, explica ONUSIDA, puede darse en cualquier lugar y hacia cualquier persona. También, tiene un efecto negativo en la sociedad, ya que “discriminar a las personas por motivos raciales causa sufrimiento individual y debilita la cohesión social”. Ejemplo de esto es la limitación a la educación de las mujeres, lo que perjudica a una sociedad que no aprovecha sus talentos.
El enfoque de ONUSIDA
El tema para el Día de la Cero Discriminación de este 2017 se basa en la importancia de eliminar la discriminación en las instalaciones de atención sanitaria, como primer paso para acabar con la epidemia del sida a largo plazo.
¿Qué influencia tiene? Debido a la estigmatización de las personas con VIH, estas se sienten desmotivadas y, algunas veces, tienden a rechazar la atención y un tratamiento que puede salvarles la vida