Durante las últimas semanas nuestro país ha vivido una situación tensa en las calles: miles de personas se han movilizado en distintas protestas para expresar su descontento con el gobierno nacional. Sin embargo, decenas de manifestantes han sido víctimas de la represión de los organismos de seguridad, que han disparado (muchas veces a quemarropa) perdigones y bombas lacrimógenas.
Debido a la necesidad de prestar ayuda a quienes salen heridos en protestas, a principios de abril comenzó a funcionar la Brigada de Primeros Auxilios UCAB (PAUCAB), una organización de estudiantes de la Universidad Católica Andrés Bello que brinda atención primaria de salud en las manifestaciones.
El grupo está integrado por 16 voluntarios de distintas carreras y cuenta con dos coordinadores: Ricardo Linares, estudiante del cuarto semestre de Ingeniería Industrial y Victor Tang, actual consejero estudiantil de la Facultad de Humanidades y Educación.
Pese al poco tiempo de formación, Ricardo Linares aseguró que en PAUCAB hacen todo lo posible por estar bien entrenados.
«Hasta el momento hemos recibido tres capacitaciones: dos sobre técnicas de primeros auxilios y una sobre la logística que debe implementarse durante una protesta».
¿CÓMO TRABAJAN?
Equipados con máscaras antigás, guantes, cascos de protección, además de los insumos para cumplir su misión, los voluntarios de PAUCAB que acuden a las manifestaciones se sitúan en las llamadas «zonas rojas y naranjas» de las protestas, es decir, al frente y en el medio de las movilizaciones.
«Cuando alguien resulta herido o asfixiado, nos encargamos de moverlo a una zona menos transitada de la marcha para verificar sus signos vitales y atenderlo adecuadamente hasta estabilizarlo. Sin embargo, si vemos que el afectado tiene una herida grave o su situación se complica, coordinamos el traslado hasta puntos de atención médica de alcaldías u otros aliados. Nosotros no trabajamos solos. Recibimos apoyo de otras organizaciones de voluntarios como los de la UCV, además de Salud Chacao, Salud Baruta y los distintos cuerpos de bomberos».
Partiendo de lo que ha visto en las marchas y de su formación en primeros auxilios, Ricardo Linares cree que los venezolanos deben saber cómo enfrentar situaciones de crisis y peligro, no solo en las protestas.
«Cuando salimos al trabajo, a la universidad, incluso al supermercado, no sabemos si volveremos a nuestros hogares. Lo mismo sucede en las marchas, desconocemos lo que pueda pasar, sin embargo hay que aprender a manejar el miedo, usarlo a nuestro favor y entender la logística que debe usarse en las protestas para evitar correr riesgos. No se trata de dejar el miedo, sino de saber qué hacer para estar seguros”.
En ese sentido, sus recomendaciones básicas son las siguientes:
Evitar ir solo a una concentración. Siempre movilizarse en grupos medianos o grandes de 10 personas como mínimo.
Al escuchar alguna detonación de bombas lacrimógenas o disparos de perdigones, verificar de dónde proviene el sonido y no correr de espalda para evitar el impacto de algún objeto contundente en la cabeza o el cuerpo.
Llevar siempre a la mano, en un koala o morral, antiácido o bicarbonato de sodio diluidos en agua para contrarrestar los efectos de las lacrimógenas.
«Pero lo más importante es mantener la calma ante cualquier situación irregular. Eso es lo que te permite tomar las mejores decisiones y salvaguardar tu integridad. Si entras en pánico, no puedes pensar y actuar correctamente».