El programa Educa 20-20 se expande y supera los 200 becarios

Comprometida con la formación de maestros de calidad,  la Universidad Católica Andrés Bello sigue brindando soluciones a la crisis y se consolida como promotora de la vocación docente en Venezuela.

Por segundo semestre consecutivo, la casa de estudios puso en marcha su programa Educa 20-20, plan de becas desarrollado en alianza con la Compañía de Jesús que subsidia hasta 100% del costo de la matrícula a jóvenes que estudien Educación en cualquiera de las sedes de la UCAB.

De acuerdo con datos aportados por las profesoras Blanca Rodríguez y Claudia Arismendi (coordinadoras de Educa 20-20 en Caracas y Guayana, respectivamente), la segunda cohorte de beneficiarios del programa quedó conformada por 107 alumnos (65 en Caracas y 42 en Guayana), quienes arrancaron su primer semestre el 24 de septiembre.

Con este grupo, el total de estudiantes becados llegó a 210, incluyendo los 103 que iniciaron clases en marzo pasado y continúan en el proyecto.

Los bachilleres que forman parte de  Educa 20-20 cursan alguna de las siete menciones de la carrera: Biología y Química, Ciencias Sociales, Ciencias Pedagógicas, Filosofía, Física y Matemáticas, Educación Integral y Educación Preescolar.

José Javier Salas, director de la Escuela de Educación de la UCAB en Caracas, reiteró la importancia de esta iniciativa en medio de la masiva deserción de profesores en los distintos niveles escolares debido a la crisis.

Recordó el papel que un educador tiene para la construcción y desarrollo del país y manifestó que no ha sido una tarea fácil entusiasmar a los jóvenes a  estudiar esta carrera.

«Nosotros tenemos estudiantes que han entendido su importancia para el país y la responsabilidad que tienen con ellos mismos en su formación. El mensaje de estudiar Educación en un país que se despedaza hay que saberlo dar. Yo creo que lo más importante es resaltar el papel del docente como garante de la verdad. Ese es el compromiso que queremos inculcar’’.

Sobre los resultados académicos, Salas calificó como positivo el balance del primer semestre del programa, pues aunque reconoció una pequeña deserción (se retiraron 26 alumnos de 129 que comenzaron en marzo), la primera cohorte obtuvo durante el período inicial un promedio de 15,21 puntos (entre los que aprobaron) y un promedio global de 13,45 puntos (sumando a quienes aprobaron y aplazaron).

Indicó que la Escuela trabaja duro brindando acompañamiento a cada uno de los beneficiarios, con el fin de procurar su adaptación y mejorar su rendimiento.

«Los muchachos beneficiados con este plan de becas gozan de seguimiento durante su época de estudio, apoyo académico, charlas, convivencias y en algunos casos se les ofrece almuerzos. Son acompañados durante toda la experiencia y se les atiende según su situación».

El director de la dependencia ucabista reiteró el compromiso de la UCAB con este proyecto y confirmó la intención de incrementar los números del programa. Confía en poder egresar, en el año 2022, la primera promoción Educa 20-20 con al menos 100 becarios.

Hablan los futuros maestros

Varios de los alumnos que fueron admitidos como becarios de Educa 20-20 expresaron su alegría y compromiso con el reto que les espera.

Michelle Moreno es una de ellas. Se inscribió para cursar Educación mención Preescolar y gracias a este plan, su sueño se hará posible.

«Considero que este tipo de programas es vital. Formar educadores de calidad ayudará a transformar todo un país y me emociona ser parte de eso. Deseo disfrutar mucho la carrera, conocer gente y mucho más la universidad y formar parte de nuevos grupos’’.

Daniel Rodríguez, quien comenzó a cursar Educación mención Ciencias Sociales, afirmó que es una gran alegría poder estudiar lo que quiere en una buena universidad, algo que, para él, no hubiera sido posible sin la beca.

»Conocí el programa gracias a una egresada de esta universidad y vi la oportunidad de estudiar la carrera que quiero en la universidad en donde siempre quise y que por las dificultades económicas no podía. Estoy muy emocionado con mi carrera, quiero dar lo mejor de mí  y aprender de todo.»

Paula Barreto optó por este programa para cursar la mención Biología y Química, con el propósito de aportar su grano de arena al país.

«Decidí entrar al programa porque siento que a Venezuela le hacen falta educadores, personas que traten de tener esta vocación para poder ayudar a reconstruir el país. Tengo demasiadas expectativas, estoy muy emocionada y principalmente espero aprender para ayudar a mucha gente».

Igualmente, María Proto, inscrita para cursar la meción Ciencias Pedagógicas, apostó por este plan como una forma de recibir educación de calidad.

«Creo que, solo si se forman buenos profesores, el país va a mejorar y con iniciativas como ésta habrá más personas que quieran y puedan estudiar».

Desde UCAB Guayana,  dos de los beneficiarios que ya están en segundo semestre manifestaron su agradecimiento con la universidad por la oportunidad que tienen de formase y ayudar a otros.

Rosleynis Brito, de 19 años de edad y cursante de la mención Matemática y Física, explicó cómo este programa ha contribuido a mejorar su vida.

“Estoy muy agradecida con la oportunidad de pertenecer al programa Educa 20-20, porque siento que la educación es la base del ser humano, por eso es una carrera demasiado importante, aunque actualmente no muy valorada. Es muy satisfactorio pertenecer al programa, me ha brindado mucho apoyo, he contado con el material y tutorías que han permitido nivelarme. Me sentido como en casa aquí en la UCAB Guayana”

Asimismo, David Rangel  -de 21 años y alumno de la misma mención- agradeció el trato que ha recibido por parte de la universidad y los profesores. 

“Ser becario de Educa 20-20 es una gran oportunidad, ya que en el país estamos necesitando más educadores que orienten a los más pequeños. Me parece que las matemáticas y la física son muy importantes y por eso elegí esa mención”.

El programa Educa 20-20  forma parte de las metas trazadas dentro del Plan Estratégico UCAB 20-20  y fue lanzado por el rector, Francisco Virtuoso, con el fin de hacer frente a la crisis de deserción docente en Venezuela.

Su objetivo es impulsar la formación de maestros con sólidos conocimientos didáctico-pedagógicos, capaces de convertirse en líderes preparados para contribuir con la transformación educativa y el desarrollo nacional.

Además del subsidio de la matrícula, los beneficiarios de este programa que así lo requieren reciben asistencia para la adquisición de bibliografía y para la alimentación.

Como contraprestación, los becados se comprometen a trabajar, por lo menos durante un año, en alguna institución perteneciente la red Fe y Alegría o a la Asociación Venezolana de Educación Católica.

♦Texto: María José Rodríguez/Fotos: Aura García y Archivo