Ante la declaración del estado de confinamiento como producto de la rápida expansión del COVID-19, el ritmo de vida se ha visto completamente afectado. Muchas personas han tenido que recurrir a las plataformas web para continuar con sus negocios, trabajos o estudios sin estar familiarizados con esta modalidad. Estos cambios  radicales pueden generar problemas de concentración o disminución del rendimiento.

A propósito de este tema, El Ucabista consultó la opinión de Zena Sleiman Dayoub, psicólogo clínico, profesora de la UCAB y directora del proyecto de psicoterapia online “Psiconfío”, quien brindó ocho recomendaciones para mantener viva la productividad en tiempos de aislamiento social.

 

  1. Establecer una rutina

Según Sleiman, debe existir un balance entre el aspecto laboral y el personal. Para eso, recomienda fijar una agenda diaria, con horarios,  que incluya trabajo, sueño, alimentación y recreación.

“Porque estemos trabajando en casa no podemos sobrepasar nuestro límite o trabajar de más. No necesariamente porque estemos más tiempo  trabajando, seremos más productivos. Al contrario, lo que podemos hacer es agotarnos y no tener el desempeño esperado. Es importante que tengamos un horario para cumplir con nuestros deberes, pero también para llevar nuestros hábitos de alimentación y sueño de forma saludable, descansar, recrearnos. Esto es relevante más ahora que antes, porque nuestros recursos emocionales se ven impactados por la situación que estamos pasando”.

 

  1. Delimitar los espacios del hogar

La psicóloga recomienda utilizar el tiempo libre para ordenar la casa, asignando un espacio, por pequeño que sea, en el que se llevará a cabo cada actividad de la rutina diaria, con el fin de hacer de los hogares un lugar de disfrute. La especialista resalta que el orden físico produce orden mental.

“Limpiar y ordenar nuestra casa para sentirnos a gusto en ella es necesario pero  también lo es asignar un espacio para cada actividad. Por ejemplo, aunque yo vaya a trabajar en el comedor, solo me dedicaré a eso de 8:00 a 12:00 m. Cuando vaya a comer, cerraré la computadora y me dedicaré a comer. Lo ideal es ejecutar el “mindful eating”, que consiste en concentrarnos en la hora de la comida, en agradecer por los alimentos y por las personas con las que estamos compartiendo. Luego de la comida, puedo volver al espacio de trabajo”.

  1. Enfocarse en el rendimiento y desarrollar la creatividad

Es normal que, como consecuencia del estado de confinamiento, las personas tengan mayores dificultades para concentrarse, motivarse y para ser productivos, en general. No obstante, la especialista sugiere repensar la manera en que la gente ha venido ejerciendo su profesión u oficio, con el fin de encontrar nuevas formas de ejercerla y descubrir habilidades que, incluso, pueden formar parte de un emprendimiento a futuro.

“Para las personas que pueden estar trabajando desde casa, porque su trabajo se los permite, este es un momento importante para replantearse sus profesiones u oficios. Aquellas que no pueden hacerlo, deben pensar qué otras habilidades o destrezas pueden explotar en este periodo y quizás comenzar un negocio a partir de ellos. Un odontólogo, por ejemplo, que no puede trabajar normalmente debido a las circunstancias pero es bilingüe, puede dar clases online”.

  1. Entender que es un proceso temporal

Sleiman explica que al analizar la situación de pandemia, es inevitable sentir ansiedad por lo que va a suceder. Sin embargo, invita a poner las cosas en perspectiva, reconocer que existen circunstancias que escapan del propio control y aprender a  asumir aquellas que sí se pueden cambiar.

“Es momento de vivir un día a la vez. Reconoce qué situaciones están bajo tu control  trabaja con ellas hoy”.

  1. Mantenerse activo y reconocer las emociones

La psicóloga recuerda que estar en constante movimiento ayuda a liberar endorfinas, a descansar mejor y a mejorar el estado anímico. Asimismo, tomar tiempo para entender lo que se siente ayuda a canalizarlo de la mejor manera posible.

“Es importante, sobre todo para las personas que no lo suelen hacer, empezar a practicar ejercicios de meditación, respiración y ejercicio físico. Esto con el fin de conectar con nosotros mismos, aprender a escuchar y reconocer nuestras emociones, conectarnos con el presente y no pensar tanto en el futuro porque, en una situación como esta puede ser angustiante”.

  1. Identificar los aspectos positivos de la crisis

Como todas las circunstancias de la vida, la pandemia tiene aspectos buenos y malos. Comprender cuáles son las ventajas que puede brindar la cuarentena es necesario para crecer en medio del proceso.

 

“En una vida en que nos quejamos de no tener tiempo, el mundo nos obliga a detenernos y a autoconocernos. Que esta sea una oportunidad para aprender a vivir con nosotros mismos y a relacionaros con los demás de una forma más amable y humana”.

 

  1. Mantener el contacto con seres queridos

 

El aspecto social envuelve todos los aspectos de la vida, incluyendo la disposición para realizar los deberes . Por esto, la psicóloga invita a utilizar las herramientas digitales que e tengan a disposición para  preservar la relación con quienes forman parte del entorno.

«Somos seres sociales y esta situación de distanciamiento nos hace sentir ansiosos, tristes, molestos, preocupados por la imposibilidad de  compartir con nuestros seres queridos.  Una de las formas que tenemos para no sentimos solos es mantener el contacto social a través de la tecnología. Aprovechemos las redes para comunicarnos con quienes extrañamos y tenemos lejos”.

  1. Buscar apoyo profesional

“Si sientes que  la situación te sobrepasa, no dudes en buscar apoyo profesional. En Psiconfío brindamos servicio de psicoterapia online a personas en cualquier parte del mundo y estamos dispuestos a ayudarte”.

Para mayor información sobre apoyo emocional y psicológico a distancia, el proyecto Psiconfío pone a su disposición su perfil en Facebook y su cuenta @psiconfioo en Instagram.

♦Texto: Albany Díaz / Foto: Freepik.es