El director de la Escuela de Administración y Contaduría señaló que la dependencia que conduce ofrece el plan de estudios más actualizado del país y trabaja en la formación de profesionales globales, con habilidades de negocio y conocimiento de las tendencias del mercado.
Constantemente, la prensa se hace eco de la «Lista Forbes» de los personajes más ricos del planeta. En ella aparecen rostros habituales como los de los empresarios Elon Musk (creador de Tesla y SpaceX), Jeff Bezos (director de Amazon), Bill Gates (fundador de Microsoft) y Mark Zuckerberg (Facebook).
La lista es un recordatorio, para las nuevas generaciones, sobre lo bien que recompensa tener habilidades y conocimientos gerenciales, pero también da cuenta de cómo hombres y mujeres exitosos emprenden estrategias y gestiones que, muchas veces, se incorporan como temas o casos de estudio en las escuelas de negocios de numerosas universidades del mundo, sobre todo de aquellas interesadas en mantener al día a sus futuros profesionales.
Precisamente la actualización constante del currículo –a través de la revisión constante de la oferta internacional de otras universidades, la aplicación de la tecnología en la formación y el contacto con empresarios y empleadores- es lo que, según Miguel Goncalves, director de la Escuela de Administración y Contaduría (EAC) de la UCAB, distingue el trabajo que realiza esta dependencia para garantizar el éxito de sus egresados.
No en vano, la EAC ha englobado la formación que ofrece bajo la marca «Negocios UCAB» y en la malla curricular de sus carreras se combinan cátedras tradicionales como contabilidad financiera o planificación presupuestaria con otras innovadoras como neuromarketing o blockchain y criptoactivos, o se han agregado ofertas académicas cortas como cursos, diplomados y minors. El objetivo: preparar profesionales con capacidad para resolver problemas en el manejo de empresas y negocios del entorno actual, a nivel nacional e internacional.
«Nuestros perfiles de egreso son los más actualizados», aseguró en esta entrevista el licenciado, especialista y magíster en Administración de Empresas, quien compartió cómo se ha ido adaptando la formación de los estudiantes sin olvidar el «rigor académico», cuáles son los obstáculos y aprendizajes que ha supuesto la educación en medio de la pandemia y qué se está haciendo de cara al Plan Estratégico UCAB 2023, hoja de ruta que guiará a la universidad en los próximos tres años y que exige la conexión, diversificación y consolidación de la calidad sustentable de todas las áreas de la institución.
¿Cuáles han sido los mayores retos en la formación académica de los estudiantes en el siglo XXI? Y ¿cómo se ha ido adaptando este proceso a los nuevos tiempos y la situación del país?
«Creo que los retos van en dos sentidos: En primer lugar, atender las necesidades de formación universitaria con el rigor y el método que esta requiere; con la profundidad, el análisis y los contenidos adecuados a los perfiles de egreso declarados en el currículo de ambas carreras (Administración de Empresas y Contaduría Pública). En segundo lugar, cómo hacerlo atendiendo a la dinámica de cambios de los mercados laborales y a las expectativas de formación de los jóvenes. Ese ha sido el reto, lograr un equilibrio entre lo que nosotros consideramos que debe ser la formación medular, lo que el mercado requiere y las expectativas del estudiante. Todo eso en un marco de hiperinflación, precariedad de servicios e inestabilidad social que ha marcado los años recientes».
¿Cómo han influido las actualizaciones tecnológicas en la el trabajo de la Escuela de Administración y Contaduría?
«La dinámica de la Escuela ha sido movernos con los cambios. La tecnología es una arista importante de los cambios, más no el único. La Universidad, en general, ha ido actualizando las plataformas tecnológicas y nosotros en la EAC hemos ido de la mano en procesos de virtualización, sistematización de procesos, transformación digital y, más recientemente con el tema de la pandemia, asumir el reto de la llamada ‘presencialidad remota’ o ‘educación remota de emergencia’. Esta involucra la adopción de herramientas tecnológicas y digitales para el manejo de la formación a distancia».
¿Han hecho o planean hacer ajustes en su método de formación académica en el marco del Plan UCAB 2023?
«El Plan UCAB 2023 plantea tres ejes importantes que tienen que ver, en primer lugar, con las conexiones de la Escuela con egresados, empresas, alumnos, profesores, universidades locales e internacionales, aspirantes y la comunidad, en general. Los tiempos requieren de universidades interconectadas lo más posible con todos los actores del entorno. En segundo lugar, se plantea un reto de transversalidad en el que estamos trabajando para ser una Escuela pionera. Creemos que nadie maneja mejor la formación académica que los especialistas de cada área, por lo tanto, para mantener niveles de excelencia académica tenemos que interrelacionarnos más con Escuelas hermanas, en aquellas áreas de conocimiento que son medulares en sus perfiles de egreso y complementarias en los nuestros. Ese ‘pensar juntos’ desde disciplinas diferentes elevará los niveles de formación, sin lugar a dudas. El tercer eje está vinculado a la gestión eficiente y sustentable de los recursos y procesos que manejamos».
¿Cuáles son los desafíos que enfrenta el alumno de Administración o de Contaduría?
«Creo que hay desafíos que son comunes para todos los alumnos, superar el inmediatismo, evitar la procrastinación, construir un método de estudios eficiente, investigar más, trabajar más en la comprensión y aplicación de los contenidos de las asignaturas, por ejemplo. En nuestras carreras los desafíos están vinculados a la velocidad de los cambios en los marcos jurídicos y normativos así como en los procesos de innovación que se dan en los mercados laborales. Es imposible conocer todos los software y aplicaciones que podrían utilizar las empresas, pero es posible desarrollar un enfoque de análisis situacional crítico para determinar la mejor práctica a seguir. No se es innovador porque se manejen las técnicas más recientes, se logra la innovación cuando se es capaz de resolver problemas desde el mayor nivel de información posible. El desafío es entonces estar informado. Más lecturas reflexivas y menos redes sociales».
¿Cuál es la visión con la que están trabajando?
«En la EAC compartimos una manera de trabajar que podría resumirse en tres palabras: pasión, rigor e información. Pasión por lo que hacemos, trabajar en la UCAB no es cualquier trabajo, en una labor que impacta la formación de seres humanos, por tanto no basta con que te guste el trabajo, tienes que apasionarte con él. Rigor en los métodos y en el cumplimiento de los procesos, de los tiempos, de las actividades y, por último, información, lo que más enriquece la cultura universitaria es compartir información, sin eso nos quedaríamos estancados siempre en lo mismo».
¿Cuáles son los retos a los que se enfrentan los egresados de la carrera? ¿Cómo se están adaptando los currículos y perfiles profesionales a las necesidades actuales del mercado?
«Existen titulaciones donde las competencias profesionales suelen ser muy estables. Las nuestras son extremadamente dinámicas. Eso amerita una continua revisión de las mallas curriculares, los planes de estudio y los programas de las asignaturas. La reforma por competencias se implementó en el año 2014 y a la fecha se le han hecho tres actualizaciones. Eso muestra lo dinámico de los perfiles. En la EAC consigues formación en áreas de neuromarketing, blockchain y criptoactivos, trading, liderazgo y coaching, que hace cinco años no existían. El reto es poder separar las ‘modas’ de los procesos de cambio que implican transformaciones permanentes en los mercados. A veces, los estudiantes se dejan llevar por tendencias que tienen un carácter temporal, que igual analizamos, pero no todo amerita la inclusión en un plan de estudio. Nuestros perfiles de egreso son, sin duda, los más actualizados entre todas las opciones a disposición de un estudiante venezolano».
¿Qué está haciendo la Escuela para garantizar esta actualización?
«Pues lo que hacemos siempre, revisando la oferta internacional de muchas universidades, tanto en nuestras carreras como en titulaciones afines, hablando con empresarios, con empleadores, identificando oportunidades de mejora, revisando opciones tecnológicas… Nuestro trabajo amerita una evaluación permanente de los entornos».
¿Cuáles dificultades prevén para este nuevo año?
«El escenario de pandemia y postpandemia es muy incierto. Esto impacta en los niveles de presencialidad que se puedan alcanzar, pero dependerá de las políticas de vacunación y el nivel de contagio que pueda darse en el país. Las decisiones gubernamentales sobre congelamiento de matrículas, las posibilidades de retorno desde el interior y exterior del país para incorporarse a clases, las facilidades de transporte público y suministro de gasolina son situaciones que ameritan revisión y seguimiento cercano. A esto hay que agregar los cambios que la situación postpandemia exija, en cuanto a adecuaciones normativas y reglamentarias por prácticas de formación a distancia que funcionaron durante más de un año y no podrán ser desconocidas en el futuro».
¿Cuáles son las expectativas de la Escuela de cara al 2023?
«Nos gusta hacer las cosas bien, Magis en acción permanentemente. El plan estratégico plantea retos de transformación importantes que la EAC está asumiendo para mantenerse como una referencia en la formación de los mejores profesionales educados en el país. Sin duda, trabajamos para lograr una Escuela más conectada, más interrelacionada en la UCAB y manteniendo los niveles de calidad con el que hacemos las cosas».
♦Texto: Diego Salgado/Fotos: Manuel Sardá
*Esta es la primera de una serie entrevistas que Elucabista.com realizará a los directores de las escuelas de la UCAB, para conversar sobre los retos de la formación profesional en la actualidad y exponer las líneas de trabajo que está adelantando la universidad para mantener a la vanguardia la calidad académica.