La doctora en Educación ofreció un balance de las «III Jornadas de Innovación y Desarrollo Sostenible», en las que profesores e investigadores de cuatro casas de estudio compartieron iniciativas científicas, tecnológicas y educativas vinculadas con la conservación del medio ambiente y el mejoramiento de las condiciones de vida de la población

A finales del mes de julio se llevaron a cabo -de manera virtual- las  III Jornadas de Innovación y Desarrollo Sostenible: Ingeniería para el Desarrollo Sostenible, promovidas por el Centro de Investigación y Desarrollo de Ingeniería (CIDI) de la Universidad Católica Andrés Bello.

En el encuentro, jóvenes talentos y expertos de la ingeniería venezolana presentaron un total de 24 trabajos que muestran la vinculación de esta disciplina académica y profesional con los Objetivos de Desarrollo Sostenible establecidos por la Organización de Naciones Unidas. 

La profesora María Isabel López, directora del CIDI-UCAB, ofreció un balance de la actividad. Recordó que la ingeniería “tiene un rol protagónico en el desarrollo sostenible” .

“De los 17 objetivos de la ONU, hay nueve directamente vinculados con la ingeniería. Como universidades, tenemos una responsabilidad enorme. Somos casas de gestión de conocimiento hacia el desarrollo del país y eso es lo que nos mueve: ir haciendo alianzas cada vez más fuertes para mejorar la formación de nuestros ingenieros”, afirmó la doctora en Educación.

Con el apoyo de la tecnología, durante los cuatro días de jornadas el CIDI logró reunir, a través de Zoom, a profesores e investigadores de la Universidad Central de Venezuela (UCV), la Universidad Metropolitana (UNIMET), la Universidad Simón Bolívar (USB) y ambas sedes de la UCAB, quienes presentaron sus proyectos en diversas áreas. 

La formulación cosmética de un labial hecho a base de manteca de mango, un proyecto de energías alternativas para la región insular,  un prototipo de aerogenerador fabricado en Venezuela o una estrategia para convertir el sector de aluminio de Ciudad Guayana en un parque ecoindustrial fueron algunas de las iniciativas dadas a conocer por los participantes.

“En ingeniería civil se presentaron trabajos sobre estructuras, materiales y geotecnia realmente destacables. También tuvimos ponencias de ingeniería química, contaminación ambiental, ingeniería industrial y generación de nuevos productos (como fibras textiles) a partir de biomasas y recursos naturales, como cáscaras de piña, semillas y manteca de mango… son trabajos sumamente valiosos para tener mejores recursos energéticos”, mencionó López.

La investigadora comentó que, desde el CIDI,  por ejemplo, presentaron un proyecto que apuesta por el uso de tecnologías apropiadas para mejorar los sistemas de purificación de agua y favorecer la agricultura familiar en los sectores cercanos a la universidad, acondicionando suelos para que sean más productivos, sin necesidad de fertilizantes agresivos, Indicó que el proyecto se ideó buscando “no sólo mejorar el uso de los recursos, sino hacerlos más eficientes, más limpios, más amigables”.

La educación en el desarrollo sostenible: una materia pendiente

A propósito de la celebración de estas jornadas, la directora del CIDI UCAB  manifestó la importancia de intensificar la labor educativa en torno al desarrollo sostenible, tanto de los futuros profesionales como de las comunidades,  pues considera que la única forma de concientizar y transformar el comportamiento de los seres humanos es por medio de la educación.

“No hay otra manera de hacer una transformación de la sociedad. Y la educación no es solamente planes formales a aplicar en distintos niveles educativos; me refiero a cómo los diversos aprendizajes pueden ser asequibles a todos los sectores, para que pueda mejorar su calidad de vida”.

Apuntó que la Facultad de Ingeniería y la UCAB como institución, desde su visión ignaciana y compromiso social, asumen esto como un valor. Invitó a manejar la formación de la manera más integral posible para tener una academia conectada entre sí, que a su vez «pueda hacer vínculo con el país, con sus comunidades y con una realidad no solamente local, sino también regional y global».

López no descartó, para las próximas  ediciones de las jornadas, incluir invitados de instituciones vinculadas a la Asociación de Universidades Confiadas a la Compañía de Jesús en América Latina (AUSJAL). “Nos interesa mucho el deseo de ir expandiendo, para hacer mayor y mejor divulgación de las actividades de investigación que se hacen en las diferentes universidades. Creemos que esa visión hacia afuera, nos alimenta a todos”, finalizó.

♦ Texto: Daniel De Alba Suárez / Fotos: Manuel Sardá