A propósito del inicio de un nuevo semestre, alumnos de seis carreras de la UCAB dieron a conocer las enseñanzas que les han dejado los semestres cursados bajo la modalidad virtual
Las restricciones de la pandemia por Covid-19 han obligado a instituciones, alumnos y profesores a cambiar su metodología de estudio y trabajo para contener los contagios y adaptarse a las circunstancias actuales. Crear aulas virtuales, encontrar nuevas estrategias y personalizar el seguimiento académico han sido solo algunos de los retos a los que, al igual que buena parte las instituciones del mundo, se ha enfrentado la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) desde marzo de 2020, con el fin de garantizar la prosecución y la calidad de la formación.
Luego de la publicación de la “Resolución sobre el desarrollo de las actividades académicas en el período octubre 2021-febrero 2022”, que dio a conocer que el semestre a iniciar el 11 de octubre será el cuarto en desarrollarse bajo régimen de educación remota, El Ucabista conversó con algunos estudiantes que vivieron la transición digital para conocer sus experiencias y aprendizajes.
Los alumnos, cursantes de distintas carreras, aseguraron que el balance es positivo y que la educación a distancia les ha permitido autorregular su educación, controlar su tiempo, obtener nuevas competencias y acceder al mercado de trabajo.
(Ver también: La UCAB retomará parcialmente las clases presenciales durante el semestre octubre 2021-febrero 2022)
Adaptación: el gran reto
A inicios de marzo de 2020, la abrupta transición a la virtualidad, el aislamiento, las fallas de los servicios básicos como luz e internet y la soledad se hicieron sentir, provocando desmotivación y estrés como emociones comunes reportadas por los estudiantes durante el confinamiento. Luego de 19 meses del inicio de esta experiencia, Armando González, estudiante de décimo semestre de Ingeniería Informática, asegura que la adaptación fue el más grande desafío de la modalidad y que superarla le ayudó a autogestionarse.
“Para mí, la fase inicial de adaptarse a un semestre totalmente online resultó ser un poco caótica, pero de todo caos eventualmente surge el orden y yo no fui la excepción. Me vi en la necesidad de organizar mis actividades pendientes desde inicios de semestre y dedicar las horas diarias de estudio requeridas para no atrasarme. Gracias a esta modalidad puedo decir que sé organizar mejor mi cronograma y llevarlo a cabo”, dijo González.
Por su parte, la cursante de décimo semestre de Comunicación Social, Rosa Camacaro, aseveró que el cambio vivido transformó a los ucabistas en “personas integrales, capaces y eficaces”.
“Mi experiencia desde el día uno ha sido totalmente retadora. Si bien somos parte de la era tecnológica, creo que todos hemos tenido que hacer un esfuerzo enorme por adaptarnos a esta nueva modalidad y sacar todo el provecho posible. He aprendido a ser más organizada, más comprometida y me siento más capaz. Creo que no hay nada que no pueda hacer o enfrentar”, comentó.
La futura comunicadora social opinó que la gestión de la universidad “ha estado a la altura de las circunstancias” y que, aunque existen cosas por mejorar, la institución debe poner en práctica lo aprendido para “seguir ofreciendo a sus estudiantes una educación de calidad, independientemente de la modalidad”.
(Ver también: Semestre a distancia: Consejos para profesores y estudiantes)
Un horizonte de oportunidades
Algunos estudiantes perciben el momento histórico que se vive en el mundo como una oportunidad de crecimiento personal y profesional. Tal es el caso de Fabiana Galíndez, cursante del último año de Relaciones Industriales y miembro del Modelo de la Organización Internacional del Trabajo (MOIT) de la UCAB, quien confiesa que no contar con clases estructuradas en una carga horaria rígida la ha ayudado a desarrollar aptitudes de gestión emocional y control del tiempo.
“En lo personal, he aprendido a ser más productiva, a no desmotivarme, a ser más resiliente y a no desistir ante las clases virtuales, porque no es lo mismo estar con tus compañeros interactuando en un salón que estar en silencio en tu casa. A nivel laboral, he podido asistir a webinars desde mi casa y realizar varias tareas a la vez, sin perder o mezclar las actividades. Tengo la prioridad de la universidad, mientras voy realizando mis pasantías académicas. Tengo una dedicación para cada cosa, pero lo puedo realizar todo desde un sitio”, apuntó la delegada del MOIT.
La flexibilidad de la modalidad remota también ha beneficiado a José Manuel Mujica, estudiante de octavo semestre de Derecho. Este ucabista -que debía emplear al menos cuatro horas diarias para trasladarse al campus Montalbán, además de tener mayor control de su tiempo de estudio- pudo ingresar al mercado laboral en la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) gracias a las notas que obtuvo en el Programa de Estudios Avanzados de Gobernabilidad, Gerencia Política y Gestión Pública de la UCAB.
“Eran cuatro horas que no podía aprovechar de una forma. Ahora me da más tiempo para estudiar, repasar y para mejorar mis notas. He aprendido a investigar y encontrar contenido. También ha sido beneficioso poder profundizar en los temas y tener a la mano ensayos, informes y trabajos. Sin duda, mi experiencia bajo esta modalidad ha sido excepcional. No sé si por casualidad o por casualidad o causalidad, pero este año obtuve una postulación a la Academia de Derecho Internacional de La Haya y pude conseguir trabajo en la Interpol”, comentó Mujica.
Autonomía y nuevas competencias
La estudiante de Ingeniería de Telecomunicaciones, Valeria De Abreu –quien está a punto de cursar su cuarto semestre online – afirma que el éxito de los estudios en línea depende en gran parte del esfuerzo de los estudiantes y que, por ello, la autonomía adquiere un nuevo valor en el contexto de la virtualidad.
“El aprendizaje de estos semestres es que si yo no pongo de mi parte para aprender lo que necesito para el futuro, nadie me va a poder ayudar. En la presencialidad es más fácil atender a las clases, pero en modalidad remota no tienes la misma presión por parte del profesor y tienes que ser el impulso que te lleva a echarle ganas y te da la fortaleza para estudiar y hacer todos los deberes”, recalcó.
En contraste, Dalia Pestana, estudiante de noveno semestre de Comunicación Social, apunta que las circunstancias de trabajo individual fomentan el manejo de las expectativas y el pensamiento estratégico, habilidades que asevera van más allá del aula y son provechosas para el ejercicio.
“Todo depende de cada alumno y de cada caso. En mi experiencia, conseguí sobrellevar situaciones que se salían de mis manos, como las fallas de luz por mi zona y el no contar con internet en mi casa. Aunque son circunstancias que no controlo, me prepararon para pensar siempre en un plan B. Asimismo, logré organizarme de una mejor manera, desde hacer calendarios hasta llevar una agenda con todo lo que tenía que hacer. Esto me permitió conocerme a mí misma y no procrastinar tanto al estar en mi casa”, concluyó Pestana.
Consejos para nuevos ucabistas
Los ucabistas próximos a egresar ofrecieron algunas recomendaciones para quienes inician su recorrido por la universidad, los invitaron a tomar parte activa en su formación y brindar lo mejor de sí mismos. A continuación, la lista de tips para los alumnos de nuevo ingreso:
- Tener paciencia y entender que viven una situación excepcional
- Utilizar agendas y cronogramas para llevar control de las asignaciones
- Probar distintos métodos de estudio y elegir el que mejor se adapte a las necesidades individuales
- Crear un espacio de estudio dentro del hogar
Desde que comenzó la pandemia, la UCAB mantiene a disposición un catálogo de recursos académicos para la educación remota. Para más información, los alumnos y profesores interesados pueden acceder a la Guía de Contingencia Académica de la UCAB haciendo clic en el siguiente enlace:
https://www.ucab.edu.ve/guia_contingencia_academica_2021_2022/
♦Texto: Albany Díaz / Fotos: Manuel Sardá (apertura) y cortesía entrevistados