El investigador Gustavo LaFontaine es el líder detrás de «Urania», sitio web que  analiza el carácter positivo o negativo de palabras publicadas en Twitter, a partir de algoritmos. El proyecto busca facilitar la recolección de datos a científicos sociales que estudian el comportamiento y ofrecer a la población un instrumento de investigación accesible y gratuito

El estudio de las emociones es una de las ramas más interesantes de la psicología, pues son procesos y estados afectivos que los seres humanos no expresan de la misma manera. Recurrir a las redes sociales para analizar los sentimientos y opiniones, a partir de las palabras y textos que se colocan en ellas, es cada vez más común entre los científicos.

Por ejemplo, en España, investigadores de la Universidad Pompeu Fabra desarrollaron el proyecto STOP (Suicide Prevention in Social Platforms) que analiza, a través de algoritmos, los textos e imágenes que colocan los usuarios en redes sociales, para determinar posibles patrones suicidas y ayudar a los especialistas a prevenir este fenómeno.

Y es que en la llamada sociedad digital, los seres humanos viven, comparten y se expresan en el mundo de la internet. De Twitter a Instagram, hombres y mujeres de todas las edades vierten sus opiniones y emociones en el plano virtual, dejando huellas que pueden ser rastreadas por los especialistas para evaluar tendencias. 

Partiendo de esto, Gustavo LaFontaine, psicólogo egresado de la UNIMET y profesor de la Universidad Católica Andrés Bello, desarrolló Urania, una herramienta de procesamiento masivo de lenguaje, basada en inteligencia artificial, que permite hacer «análisis de sentimiento», es decir, catalogar y valorar automáticamente palabras o frases  en función de las publicaciones que se hagan en redes sociales. Todo desde una página web de acceso libre.

El proyecto está siendo adelantado, desde hace más de un año, desde el Centro de Investigación y Formación Humanística (CIFH) de la Facultad de Humanidades y Educación, y surgió de una pasión e inquietud académica del docente por la ciberpsicología.

“Como subárea, la ciberpsicología estudia la interacción entre los seres humanos y la tecnología; cómo nos cambia y cómo nosotros creamos la tecnología a raíz de nuestras necesidades como humanos”, dice LaFontaine.

La herramienta  fue bautizada con el nombre de la musa de la astronomía, pues en palabras del investigador, “como personas, podemos hallar inspiración en las artes, en la música, también en las matemáticas; para mí este proyecto es un encuentro de las ciencias y las humanidades, entre la computación y lo humano”.

 

¿En qué consiste Urania?: un breve repaso

De acuerdo con la presentación disponible en urania.akanat.link, página oficial del proyecto, Urania constituye una «ventana a los discursos del mundo digital»  y una «herramienta introductoria y de libre acceso al análisis de sentimiento del lenguaje natural en redes sociales». La plataforma se basa en algoritmos que utilizan técnicas de procesamiento del lenguaje humano para determinar la carga emocional o sentimientos que tiene cualquier palabra en un determinado contexto, a partir de una muestra de conversaciones o textos que se publican en la red social Twitter.

Pero, ¿cómo funciona? Al ingresar en el website, el usuario solo debe crear una cuenta personal y seleccionar la opción «Análisis de sentimientos en Twitter», colocar la palabra que desee y un número específico de tuits que le sirvan como muestra para la evaluación que quiera realizar.

A partir de allí, el servidor explora en la red social y reúne el contenido emocional, comparando a la palabra ingresada con el conjunto de tuits, para determinar si la carga suele ser positiva o negativa.

«Es una inteligencia artificial que toma información de las redes sociales y procesa esa información para darnos un análisis de las emociones», resume LaFontaine.

Por ejemplo, si el usuario quiere saber qué carga emotiva tiene la UCAB en redes sociales, solo tiene que ingresar la palabra y  colocar un número especifico de tuits a explorar. El sistema ofrece un resultado que incluye el análisis general de sentimiento (una puntuación global que promedia la información y determina la prevalencia positiva o negativa de las opiniones sobre el tema), el índice de negatividad (puntuación que ayuda a estimar la prevalencia de consideraciones negativas que el tópico pueda tener), el porcentaje de emocionalidad (contenido afectivo de los tuits relacionados), la proporción entre palabras positivas y negativas y una nube de palabras con los términos que más se están utilizando en la red al hablar de la UCAB.

¿Cómo se determina la polaridad positiva o negativa de una palabra? LaFontaine aclaró que no hay una sola ruta. Con Urania, se utiliza un algoritmo basado en reglas, que «sencillamente es un conjunto de normas que se cumplen».

Adicionalmente, la herramienta se nutre de un Lexicón adaptado a la sociedad venezolana, un diccionario afectivo de palabras que el psicólogo social desarrolló partiendo de un modelo generado en la Universidad de Ontario:  “Aquí la personas pueden votar la carga emotiva de un grupo de palabras. Es un espacio para que el venezolano nos diga qué palabras considera positivas o negativas”, indicó.

 

Disminuyendo brechas: Investigación al alcance de todos

Según reseña el portal  Itelligent.es, el «análisis de sentimiento» -o minería de opinión, como también se le conoce- puede ser muy útil para las organizaciones y personas, porque permite «recopilar información suficiente para conocer qué piensan o qué opinan los usuarios en la red Internet» sobre marcas, productos, personajes o cualquier otro tema. La consultora de mercadeo digital Aritmetics agrega en su portal web que esta técnica permite realizar «seguimiento del estado de ánimo del público sobre un producto en particular».

Para LaFontaine, Urania puede servir como herramienta de recolección masiva de datos, útil para estudios de comportamiento que adelanten psicólogos, sociólogos y otros científicos sociales. También busca ofrecer una tecnología de fácil acceso que permita acercar la investigación de estos temas a la población general, sin importar si tiene habilidades tecnológicas o de programación.


“En países como Venezuela, experimentamos una brecha social que separa a las personas que tienen competencias en informática o programación de aquellas que no, pero tienen el potencial para investigar. Esta brecha tecnológica es algo que me interesa tratar de reducir en la medida de lo posible. No es solamente el análisis de las emociones, es toda la experiencia de usuario que acompaña a esto, que permite a una población sin conocimientos o herramientas para desarrollar esta tecnología e implementarla, tener acceso directo a ella”, dijo. 

 

Urania en tiempo futuro

El investigador espera, próximamente, integrar a la plataforma otras redes sociales como Reddit y Facebook, y explorar el contenido afectivo depositado en ellas por sus usuarios con sistemas más robustos, como el deep learning, otro de los sistemas de programación que  entrena a una computadora para que realice tareas; destacó el apoyo incondicional que ha recibido de parte de sus colegas, quienes -además- han demostrado gran receptividad a lo que pueda generar una herramienta de este tipo a largo plazo para las ciencias sociales.

LaFontaine puntuó que, actualmente, lo más interesante sobre estas tecnologías no es necesariamente ellas como ciencia, sino las implicaciones morales, éticas y sociales que conllevan: “son preocupaciones que, en otros países, arropan a nivel político y social”. También dejó claro el poder y la importancia de la ciencia ficción en el desarrollo de estas iniciativas.

“Como Bruno Latour dice: no debemos seguir pensando en que los objetos son cosas donde depositamos significados; tenemos que empezar a pensar que los objetos son agentes transformadores de la experiencia humana. La ciencia ficción y la tecnología marcan la pauta de los fenómenos sociales”.

Los interesados en conocer más de este proyecto, valorar la carga emocional de un conjunto de palabras y revisar el análisis de sentimientos en Twitter de otros vocablos, pueden hacer clic en el siguiente enlace: https://urania.akanat.link/

 ♦ Texto: Daniel De Alba Suárez / Fotos: Freepik.es (apertura) y cortesía Gustavo LaFontaine