Desde el 30 de mayo y hasta el 30 de junio los jóvenes que cursan de primero a quinto año en instituciones estatales podrán presentar, de forma gratuita, confidencial y autogestionada, las pruebas diseñadas por la Escuela de Educación para evaluar qué tanto han aprendido sobre matemática, habilidad verbal, ciencias naturales, ciencias sociales, química e inglés

«Venezuela está transitando por una tormenta escolar perfecta», asevera el director de Proyectos Especiales de la Escuela de Educación de la UCAB, José Javier Salas. El también licenciado en Educación mención Física y Matemática sugiere que no hay manera de estar bien. «Profesores mal pagados, instituciones educativas descuidadas, un Estado que ve la educación como un medio para perpetuarse; la pandemia de covid-19, educación remota, problemas de conectividad y profesores no preparados para este sistema», sostiene.

Sin embargo, es importante saber cómo se encuentra cada estudiante dentro de su grupo. Por ello el profesor Salas está invitando  a que los alumnos de bachillerato de colegios públicos comprueben qué tanto saben sobre materias fundamentales del programa curricular, tomando las pruebas virtuales autogestionadas, confidenciales y gratuitas del Sistema de Evaluación de Conocimientos en Línea (SECEL), las cuales han sido diseñadas por expertos de la Escuela de Educación de la universidad para medir el aprendizaje de los estudiantes de educación media en seis áreas: matemática, habilidad verbal, química, ciencias naturales, ciencias sociales e inglés.

El lapso estará abierto desde el 30 de mayo y hasta el 30 de junio, a través de la página web del SECEL: http://w2.ucab.edu.ve/secel.html.

«Queremos que el estudiante se vea en un espejo y descubra qué ha aprendido en el año escolar pasado. Tiene que ser una oportunidad para ver dónde tiene que mejorar y dónde está bien. Nosotros hacemos evaluaciones con los pensa equilibrados. Ofrecemos 20 pruebas distintas y los estudiantes las van tomando de manera libre, cuando quieran, e inmediatamente el sistema les ofrece retroalimentación. Además, les da un mensaje que los invita a buscar información aquí o allá. Lo importante es que no se conformen con lo que tienen, que aprovechen el tiempo», afirma Salas, quien es responsable de este proyecto.

A la espera de resultados previsibles

El SECEL fue activado en el año 2019, como parte del proyecto Reto País, cuando la UCAB se propuso evaluar y comparar la situación académica de los estudiantes de colegios públicos y privados del país, ante la inexistencia de algún instrumento oficial en la materia.

Además de ofrecer la calificación (del 1 al 20) al alumno que toma el examen, a través del Sistema la Escuela de Educación consolida resultados y promedia notas para determinar cuál es la situación de aprendizaje en cada año de bachillerato.

La intención es contar con data dura y confiable que sirva de parámetro objetivo para emprender acciones correctivas en materia pedagógica. «En junio veremos los efectos de la pandemia entre 2021 y 2022. Uno debería suponer que, tras la vuelta a la presencialidad, encontraremos resultados un poquito mejores. En general esa sería la perspectiva. Pero, incluso si salen mal, no se trata de espantar al docente o al colegio, sino que se pueda hacer algo con esos resultados», precisa Salas.

En esta oportunidad, los datos de 2021 se juntarán con los de 2022 para ofrecer una visión más global de los promedios de notas, durante un año escolar marcado por el confinamiento y la educación a distancia. Hasta ahora, han tomado la prueba unos 20 mil alumnos, principalmente de escuelas privadas, pero la idea es incorporar  al menos 2.000 cursantes de instituciones públicas para tener un panorama completo, ya que en el país, 83 % de las instituciones educativas están bajo el control del Estado. 

«Los resultados que llevamos hasta ahora son variados, algunos colegios públicos están por encima de los promedios de los privados y, viceversa. Aún no hay un consenso porque el estudio continúa», menciona el profesor, quien adelanta que una vez que concluya esta etapa, la Escuela de Educación podrá analizar y redactar el informe final. Su publicación estará disponible en el mes de julio.

«El informe que viene será muy completo y muy extenso. Tendrá la medida del año pasado junto con esta de finales de mayo y comienzo de junio en instituciones públicas. Así podremos cerrar el trabajo que tiene un año académico de retraso. Eso tenía que salir en noviembre de 2021 y no salió. Estábamos en otra cosa, recogiendo data y ahora tenemos mucha más información».

 

 

Lo que viene reflejando la data

Desde su lanzamiento en 2019,  los resultados de las pruebas del Sistema de Conocimientos en Línea de la UCAB  han dejado en evidencia las deficiencias formativas de la educación media venezolana.

Según reflejó el primer informe de noviembre de 2019,  para el cual se realizaron más de 2.300 pruebas en 14 entidades del país, el promedio de notas en áreas como matemáticas iba de 12,78 entre alumnos de primer año a 5,88 entre los de quinto . En el caso de habilidad verbal,  las calificaciones iban de 10,28 puntos en primer año a 13,21 sobre 20 entre los alumnos de quinto.

En el reporte de noviembre de 2020 -para el cual se efectuaron solo 750 pruebas debido a las restricciones ocasionadas por la pandemia-  las calificaciones promediaron, en matemáticas, desde 10,42 puntos en primer año a 7,11 en quinto año, mientras en habilidad verbal las notas promediaron  desde 10,36 puntos en primer año a 13,73 en quinto año. 

A modo de síntesis, este estudio afirmó que la pandemia influyó en el desarrollo escolar habitual,  «truncándose en muchas ocasiones la cobertura de los programas de estudio. De forma generalizada se establecieron políticas por rescatar y abordar los elementos esenciales al mismo tiempo que se daban los primeros pasos para cumplir con la virtualidad forzada e improvisada. Esto generó desánimo en algunos estudiantes quienes confirmaban con las evaluaciones las brechas entre lo estudiado y lo que debió estudiarse».

 

Después de las pruebas, el estudiante sabrá dónde mejorar

Para José Javier Salas, el SECEL va más allá de un simple diagnóstico. Su objetivo, al final, es ofrecer insumos que sirvan para mejorar la vida académica de los estudiantes.  «Necesitamos estimular la participación de los estudiantes. Tenemos claro que hay una brecha entre colegios públicos y privados, pero el diagnóstico es esencial. Es un examen que hay que hacer frecuentemente y no esperar hasta el último momento, con estas pruebas se puede medir el desempeño y, en función de ello, tomar acciones para mejorar. La prueba puede estimular cambios deseables. Nadie pretende, después de todo lo que hemos vivido, asumir que la cosa está bien».

Entre los cambios que los propios alumnos pueden aplicar, el exdirector de la Escuela de Educación incluye el replanteamiento de las estrategias de estudio y el uso del tiempo libre para repasar temas que no alcanzaron dominar durante el curso.

Además, con los resultados de los exámenes los estudiantes podrán tener una idea más amplia sobre qué temas no están siendo abordados en sus colegios. «Es lamentable porque nos hemos convertido en portadores de malas noticias. Pero ¿Cómo decimos otra cosa? Dame algún insumo para darte alguna buena noticia. La buena noticia es que lo malo no es permanente. Uno no está condenado a tener 08 toda la vida. La idea es que veas cómo estás y trabajes sobre eso», finaliza Salas.

Los interesados en tomar las diferentes pruebas del SECEL tendrán oportunidad desde el 30 de mayo hasta el 30 de junio. Para ello deberán conectarse al sistema haciendo clic en este enlace: http://w2.ucab.edu.ve/secel.html

♦Texto: Grace Lafontant León/Fotos: AP (apertura) y archivo (internas)