Bajo la premisa «Aprender haciendo», el nuevo plan de estudios aumentó la formación práctica desde los primeros semestres y concentró en tres las menciones o áreas de especialización. La directora de la Escuela, Yasmín Trak, compartió detalles de esta reforma curricular, que entrará en vigencia a partir del semestre marzo-julio 2023
La Universidad Católica Andrés Bello aprobó recientemente la reforma del pensum de la carrera de Comunicación Social, la cual incluye la modificación en las cátedras y menciones impartidas y la reducción de cinco a cuatro años del tiempo de estudio de esta titulación.
Entre otros aspectos, el plan de estudios 2023 establece un ciclo común de formación, que los alumnos cursarán durante los tres primeros semestres. Asímismo, a partir del cuarto y hasta el octavo semestre los estudiantes se incorporarán a una de las tres menciones o áreas de especialización que ahora ofrecerá la titulación: Comunicación Audiovisual, Comunicaciones Integradas de Mercadeo y Periodismo. El anterior programa incluía un total de cinco opciones; las otras dos eran Comunicaciones Corporativas y Guionismo.
El pensum también incluyó, desde el segundo semestre, materias que permitirán la integración gradual de los alumnos a actividades laborales; además, se refrescaron los contenidos de las asignaturas actuales que se mantuvieron en el nuevo diseño curricular y se optimizaron las metodologías pedagógicas, que ahora estarán más centradas en la práctica, en el “aprender haciendo”.
Yasmín Trak, directora de la Escuela de Comunicación Social, aseveró que la modificación curricular obedece, entre otras razones, a la tendencia mundial a diseñar titulaciones universitarias de menor duración, con la intención de preparar a los profesionales para una inserción más rápida en el mundo laboral.
“La academia no puede permanecer de espaldas a los requerimientos de la población estudiantil, que busca conocimientos que se ajusten a la realidad y a lo que impone el ámbito laboral”, señaló.
A su vez, la profesora comentó que la reforma busca satisfacer las demandas profesionales de una sociedad de información transmedia y de ritmo vertiginoso, sin olvidar la calidad académica que ha caracterizado a la Escuela de Comunicación Social de la UCAB en sus 61 años de historia. “Los contenidos cada vez son más integradores en la sociedad contemporánea. No hay contenidos que se pierdan, se reubican, se reorganizan, se integran, lo que exigirá del nuevo estudiante competencias para el trabajo autónomo e independiente”, destacó.
A pocas semanas de la entrada en vigencia de este nuevo plan de estudios, Trak compartió algunas claves del cambio curricular, pionero en el país, que empezará a regir con el semestre que arrancará en marzo de 2023. «Su implementación será progresiva; es decir, no se aplicará a todo el estudiantado de la carrera, sino solo a aquellos que comiencen su primer semestre», adelantó la profesora.
¿En qué consiste la nueva propuesta de pensum en Comunicación Social? ¿Cuáles son las diferencias y las mejoras en cuanto al proceso de formación y de cara al mercado laboral?
«El pensum de Comunicación Social busca que el joven se forme desde muy temprano en las tareas profesionales, que nuestros alumnos ‘aprendan haciendo’. Eso conlleva que materias que antes se veían a partir de la mitad de la carrera ahora se aborden desde los primeros semestres, permitiendo una profundización paulatina, una recursividad en las actividades que conduce al dominio de las competencias requeridas en el mercado laboral.
El estudiante de este nuevo diseño curricular tendrá desde más temprano experiencias que lo capaciten para incorporarse al mercado laboral, sin perder los contenidos que se veían en el plan de estudios anterior, que no es un diseño superado ni obsoleto porque los programas del plan de estudios actual han sido modificados y adecuados para que todos nuestros alumnos reciban una formación de calidad.
Estamos hablando de una organización diferente de las unidades curriculares y muchos nombres de asignaturas se transforman para reflejar con precisión la actualización de saberes».
Habrá tres menciones o concentraciones. ¿Cuál es el término adecuado a utilizar? ¿Cuánto tiempo estuvieron trabajando en la reforma y qué trabajo de revisión de programas curriculares similares, de Venezuela u otros países, hicieron para producir este nuevo pensum?
«El término adecuado, conforme a las pautas que se derivan de la aprobación del pensum de Comunicación Social por parte del Consejo Nacional de Universidades es ‘opciones’. Ahora, no corresponden las denominaciones de menciones ni concentraciones.
Este plan de trabajo tiene mucho tiempo en gestación, aproximadamente más de un año. Dentro del proceso de revisión de propuestas consideramos los juicios de especialistas, estudiantes, egresados y empleadores, pero además, consultamos informaciones provenientes de otras universidades internacionales que tienen la carrera de Comunicación. Las voces de los ucabistas permean la nueva malla curricular. La meta es tener un pensum que se ajuste a los tiempos y a los espacios actuales».
¿Por qué volver a una menor cantidad de “opciones”? ¿No funcionaron las más de cinco concentraciones anteriores a nivel operativo en docencia y en cuanto al quórum de estudiantes inscritos?
«Los tiempos modernos son contrarios a la parcelación del conocimiento; la complejidad es el rasgo de la contemporaneidad. Los modelos tendentes a la parcelación del conocimiento van desapareciendo. El mercado laboral exige de la presencia de un profesional cada vez más y mejor formado y la oferta laboral conducirá a nuestros egresados por caminos laborales imprevistos. Hay que prepararlos –y prepararnos- para estos tiempos en los que la incertidumbre de una única oportunidad de empleo y un mercado laboral muy competitivo está dominando.
Los egresados de la UCAB (y de Comunicación Social, en particular) tienen competencias para desempeñarse en diferentes espacios laborales. Por cierto, el plan actual, integrado por concentraciones, se caracteriza por tener materias suficientes para tener competencias en las otras concentraciones que el alumno no curse; en otras palabras, es una ganancia que conservamos en este plan de estudios; nunca hubo saberes separados, aislados.
Por otra parte, las propuestas académicas no se construyen sobre la base de los asuntos económicos o administrativos que enfrenta un país o una institución en particular; por el contrario, apuntan al desarrollo de una nación y su gente a través de la formación de profesionales comprometidos con su área disciplinar y con la sociedad».
¿Cuándo empezará a regir este nuevo pensum y cómo será el régimen de transición? ¿Podrán los estudiantes que actualmente cursan la carrera en la universidad beneficiarse con la modificación? ¿Podrán hacerlo alumnos de otras universidades que quieran hacer un traslado externo?
«Lo primero que desearíamos dejar claro es que la Escuela se ha esforzado por la equidad: la formación es de calidad para todos nuestros jóvenes. Los alumnos de los planes anteriores cuentan con programas renovados. Cada semestre se revisan los programas de los cursos que se impartirán en el siguiente período académico, a fin de que nuestros jóvenes reciban la mejor formación y la más actualizada. De eso estamos absolutamente orgullosos y satisfechos.
De acuerdo con lo aprobado por el Consejo Universitario, el plan de estudios 2023 se inicia en el venidero mes de marzo y su implementación será progresiva; es decir, no se aplicará a todo el estudiantado de la carrera, sino solo a aquellos que comiencen su primer semestre. Solo quienes para el período académico septiembre de 2022–enero de 2023 estaban en su primer semestre serán migrados al nuevo plan en marzo próximo. Quienes en el futuro soliciten traslado externo serán incorporados al nuevo diseño curricular. Nuestros egresados podrán solicitar cursar asignaturas del plan de estudio 2023 bajo la modalidad de alumnos extraordinarios que contempla la universidad en el reglamento correspondiente».
¿Qué pasará con las tesis o los trabajos finales? ¿Cómo serán evaluados los estudiantes al final de la carrera?
«Uno de los grandes desafíos que enfrenta este nuevo plan de estudios es la evaluación. Todos deberíamos preguntarnos: ¿para qué se evalúa?; ¿solo para que el estudiantado demuestre conocimientos?; ¿solo para cumplir con un requisito de una cátedra? La evaluación es ahora un desafío: tenemos que pensar que la evaluación también es una estrategia de aprendizaje situado, real, contextualizado. No podemos seguir haciéndolo como en décadas anteriores. Hay que evaluar para los tiempos modernos. En este nuevo plan de estudios, evaluar es realizar actividades reales que desarrollen aprendizajes, con pertinencia y con sentido de retroalimentación hacia estudiantes y docentes.
Los paradigmas sociales han cambiado y, por ello, evaluar no solo es conocer y medir los saberes necesarios para el desempeño exitoso; sino además, aplicarlos para lograr objetivos profesionales reales, propios de situaciones laborales verídicas. Nuestros alumnos del plan 2023 deberán elaborar portafolios profesionales, para lo cual necesitarán conocer muchos contenidos propios de las áreas de investigación aplicadas a nuestra disciplina. Así podrán presentar productos de investigación propios de los espacios existentes dentro y fuera del ámbito universitario. No serán trabajos para la academia simplemente, sino que, además, serán productos que les permitirán presentarse y enfrentar el mercado laboral exitosamente y, a su vez, tener las herramientas adecuadas para triunfar en un postgrado o en otras propuestas formativas, pues contarán con un conocimiento previo que les posibilitará construir su propio aprendizaje y juzgar críticamente los contenidos que se les impartan. Es la experiencia que valida teorías y prácticas».
¿Este cambio de pensum vendrá acompañado de nuevas actualizaciones, a nivel de estructura, en la Escuela? ¿Nuevos salones, estudios o reformas en los mismos?
«La estructura y organización de la Escuela debe responder a la realidad de su misión y visión. No la define uno u otro plan de estudios. Como organización, la Escuela debe atender –tanto en su propuesta académica como en la estructura administrativa que la soporta- a la consecución de sus objetivos en el marco del plan estratégico de la universidad en todos sus ejes, independientemente del plan de estudios. Los diseños 2015 y 2019 han disfrutado de los mejores espacios y dotaciones. Para el plan 2023 continuará lo que es una política de la universidad para todas las carreras: estar a la vanguardia en espacios acordes y con equipos de punta. Siempre es necesario seguir creciendo y adaptándonos al contexto interno y externo, tanto en la gestión del talento como en la dotación tecnológica. No es un asunto solo del pensum: es una política de nuestra institución».
Todo cambio trae consecuencias y detractores. ¿Están preparados desde la Escuela de Comunicación Social para las críticas que podrían surgir a propósito de esta nueva reforma? ¿Cómo se manejó este tema con el cambio de pensum, considerando la eliminación de ciertos contenidos teóricos y la unificación de otros?
«Todas las reformas curriculares han enfrentado críticas. Si los promotores no hubiesen decidido firmemente llevar a cabo los cambios, todavía tendríamos dentro de la UCAB diseños curriculares propios para la Venezuela de los años 60. Nuestro alumnado solo sabría de máquinas de escribir mecánicas, sin que este comentario no reconozca que de esas teclas salieron grandes reportajes, grandes libros, grandes artículos. Afortunadamente, cada momento ha sabido dar cabida a las transformaciones y ha podido acompasar las críticas, oyéndolas y ponderándolas.
La mayoría de las objeciones que se pueden recibir tienen un valor que nos puede ayudar a transitar el camino de las transformaciones, con mayor precisión y con mayor éxito, con seguridad de que se ha hecho bien el trabajo. Los movimientos curriculares crean incertidumbres, quienes los promovemos estamos impedidos para anticipar todas y cada una de las visiones que se generen, pero al surgir críticas, opiniones y comentarios, estos nos sirven para validar, mejorar y crecer. En la UCAB –y fuera de ella– hemos escuchado muchas voces, hemos reflexionado sobre ellas y hemos incluido cambios. No eliminamos áreas o contenidos, los optimizamos, reorientándolos y adaptándolos a las demandas actuales«.
¿Qué les diría a los jóvenes que están interesados en cursar esta carrera? ¿Por qué estudiarla en este momento y por qué en la UCAB?
«La UCAB es la primera universidad privada del país y cada día se posiciona como una de las mejores universidades, incluyendo las públicas. Habría que preguntarse por qué y, entre las múltiples contestaciones, encontraremos que es una universidad que forma para el mundo laboral en contextos locales y globales, para el presente y para el futuro, que egresa profesionales con compromiso social, con capacidad de trabajo autónomo y con espíritu indagatorio. Este nuevo pensum contribuye con el desarrollo de estas competencias.
Es imposible en un mundo en el que la tecnología da saltos día a día que un profesional solo maneje contadas técnicas, contados programas. Es indispensable el desarrollo de competencias que apunten al manejo de la información que se genera en diferentes medios y plataformas y con una diversidad de actores cada vez mayor. Nuestros egresados son y serán preparados para adaptarse al cambio social y tecnológico, a caminar y resolver en caminos de incertidumbre y de variación, a crear, a innovar. Eso es este nuevo plan de estudio: un equilibrio entre lo logrado en la actualidad y lo necesario para enfrentar las actividades, las estrategias profesionales y los adelantos venideros».
Con este pensum, ¿qué se puede esperar de los nuevos estudiantes de Comunicación Social y de sus egresados?
«Durante mi gestión, he visto pasar varias promociones y cohortes. Los planes de estudio tienen que ser flexibles y dar lugar a ajustes, modificaciones y actualizaciones, pero también deben tener la suficiente estructura y estabilidad para servir de bitácora para la formación profesional que apunta a un perfil de egreso que se ha construido en el tiempo y que se revisa continuamente.
Afortunadamente, esto es así en la UCAB. Cada nuevo plan se adapta a los nuevos tiempos, por lo que, con el plan 2023, tendremos egresados que sepan enfrentar los momentos actuales, movedizos, cambiantes, heteróclitos, inseguros. Eso lo ha logrado el plan actual, en su momento punta de lanza en Venezuela. Ese es el compromiso del nuevo plan 2023. Y en varios años, no sabemos cuántos, al menos eso esperamos, se hará un nuevo diseño curricular que se enfrente a los nuevos tiempos, a las nuevas realidades, a las nuevas necesidades. Un comunicador social siempre debe estar actualizado, por lo que los planes de estudio que los forman también».
El nuevo pensum de la licenciatura en Comunicación Social de la UCAB puede ser consultado aquí: https://elucabista.com/wp-content/uploads/2023/02/PensumCOMSOCIALUCAB2023-DEF.pdf
Para más información sobre este y otros temas relacionados con la Escuela de Comunicación Social está disponible la cuenta @ComSocialUCAB en todas las redes sociales.
♦Texto: Daniel De Alba Suárez/Fotos: Manuel Sardá