Las instituciones llamaron a distintos sectores a incorporar sus propuestas en este documento en desarrollo, que será llevado al Foro Global de Ecoturismo 2025, en España, y que busca ser lo más participativo posible, incluyendo al Poder Ejecutivo. La iniciativa sentaría las bases para la explotación sustentable de la biodiversidad venezolana, con especial énfasis en la región amazónica
Venezuela tiene la posibilidad real de crear una marca país con el ecoturismo y desarrollar así un producto bandera que lo posicione en el top ten mundial.
Convencidos de que eso no es una utopía, Joaquín Benítez, director de Sustentabilidad Ambiental de la UCAB y Antonio Pestana Drumond, director de la Asociación Venezolana de Ecoturismo y Sostenibilidad (AVES) o Eco Alianza Venezuela, están invitando a participar en la redacción de un documento-país que recoja, de forma «amplia, inclusiva y generada participativamente», la posición de los grupos expertos para llevarla al Foro Global de Ecoturismo que se realizará en Barcelona (España) en mayo de 2025.
Ambos promotores explican que la convocatoria para presentar las contribuciones especializadas sobre ecoturismo está abierta desde el pasado 1 de julio y cerrará el próximo 30 de agosto. Serán recibidas a través de la dirección [email protected].
Hasta el momento están comprometidas unas 30 organizaciones, entre comunidades, consejos comunales, ONG, líderes indígenas, empresas privadas, campamentos y cooperativas.
El acopio de todos los aportes quedará en manos de un comité redactor, ya constituido, que, en ocho días de trabajo y en modalidad telemática, dará forma al documento final, titulado «Declaratoria Ecoturismo de Venezuela-DEV2024″.
El director de Sustentabilidad Ambiental de la UCAB recalcó el interés que existe para que el documento se elabore «con la más alta participación, incluyendo instancias del Poder Ejecutivo a quienes vamos a invitar».
«Necesitamos que ese proceso sea abierto, transparente y que la declaratoria final recoja todo ese esfuerzo», sostuvo Benítez.
El texto definitivo será presentado en un evento presencial en la sede de la UCAB, en una fecha por definirse entre finales de septiembre y principios de octubre.
En ese encuentro se rendirá homenaje a los pioneros del ecoturismo en Venezuela y, particularmente, al empresario y ambientalista Peter Bottome, fallecido en 2016. También se prevé, en este mismo marco, hacer por vez primera en el país una declaratoria de ecoturismo urbano, en la conmemoración de los 20 años de la Primera Declaración Universal de Ecoturismo Urbano que se hizo en Ciudad de México.
Pero antes, este mismo mes de julio (el día 7 del mes 7, a las 7:00 p.m.) la UCAB y Eco Alianza invitaron a conectarse a un foro, vía WhatsApp, para unirse a la celebración mundial de las 7 maravillas, donde la UCAB Guayana representará a Venezuela.
«Este concepto entra en la declaratoria con la idea de que Venezuela es País Maravilla gracias a la Amazonía y eso se va a utilizar para la creación de la marca venezolana. La UCAB va a participar a través de la sede de Guayana, que está ubicada en la Amazonía venezolana y es parte de nuestro producto amazónico. Estuvimos trabajando durante muchos años y conseguimos que Venezuela fuera considerado uno de los Países Maravilla», afirmó Pestana Drumond.
¿Cómo participar en la Declaratoria Ecoturismo de Venezuela 2024?
El ingeniero Joaquín Benítez recordó que, luego del convenio suscrito por la universidad con la AVES-Eco Alianza Venezuela, en 2023, se aprovechó el reciente II Congreso Nacional de Excursionismo (CONEX), desarrollado en la UCAB Montalbán, para avanzar en una mesa de trabajo. Allí, 19 personas se encargaron de levantar la hoja de ruta para una nueva etapa de evaluación sobre el ecoturismo venezolano.
Pestana precisó que la última declaratoria sobre ecoturismo que se hizo en Venezuela data de 2015. «Creo que llegó el momento, nosotros consideramos que esta es una manera de cambiar el enfoque que se tenía del petróleo para que sea un enfoque más natural, más verde, y que genere empleo y beneficio para las comunidades. Ni el sector privado, ni el sector público han visto al ecoturismo como una industria y ese ha sido el problema», dijo el ambientalista.
De paso, mencionó que hay que aprovechar los fondos que la Unión Europea ha acordado aportar a países de América Latina para el cumplimiento de la agenda 2030 y la descarbonización.
Pestana insistió en que el documento-país busca crear «las reglas del juego para Venezuela, adaptadas a la idiosincrasia nacional (…) Aunque existen unas reglas globales, Venezuela está en el letargo en materia de ecoturismo, estamos a años luz».
Añadió que el país puede tomar el ejemplo de España, que hizo su primera declaratoria de ecoturismo en 2016 y, a partir de ese momento, se involucraron el sector privado y público y «esa industria despegó».
Para el presidente de la AVES, quien tiene décadas vinculado al tema del turismo y el ecoturismo, el camino está muy claro y la apuesta económica venezolana debe ser dejar a un lado los hidrocarburos y abocarse al ecoturismo.
«Venezuela lleva 30 años apuntando hacia un producto que no es el nuestro y quiere seguir apostando a perdedores cuando podemos entrar al grupo de los mejores del mundo (..) El ecoturismo es la Yulimar Rojas de la industria de viajes, pero lo deben entender en todos lados», ilustró el promotor en referencia a que la campeona mundial del salto triple probó antes con otras áreas del atletismo sin el mismo éxito.
La actividad en la que están centrando sus esfuerzos la UCAB y Eco Alianza apunta a establecer la década del 2024 al 2034 como «el decenio de la transición ecoturística» nacional.
En esta primera etapa hay tres maneras de participar, indicó Pestana: 1) como redactores y corredactores activos permanentes; 2) como miembros del nuevo movimiento Somos Ecoturismo; 3) como aliados institucionales, socios empresariales o patrocinantes que se unen al reto de la transición ecoturística.
El ambientalista también citó a la revista Forbes, que «dijo que la Amazonía será el producto número 1 de la próxima década en la explotación del ecoturismo», y mencionó que lo que se pretende es que Venezuela «tome un poco de esa torta» que, afirmó, se la come Brasil en su mayoría y algo Colombia.
En este punto, Antonio Pestana precisó que la profesora Florencia Cordero, del equipo del Observatorio Guayana Sustentable de la UCAB, «está clara en que lo que nos puede llevar al éxito es la Amazonía».
Lejos de lo que algunos pudieran creer, el activista explicó que el hecho de que Venezuela no aparezca en las listas de los destinos ecoturísticos es bueno, porque se puede partir de cero y de a poco, pero con productos de calidad. En cambio, el país está en el puesto 160 como destino turístico. «No existe», dijo.
UCAB, plataforma de profesionalización para el turismo sostenible
Joaquín Benítez, individuo de número de la Academia Nacional de Ingeniería y Hábitat, destacó que la Dirección de Sustentabilidad Ambiental de la UCAB está comprometida con la superación del rentismo y del extractivismo para que se generen en Venezuela opciones ambientalmente sostenibles, en concordancia con los ODS de la ONU.
Al mismo tiempo, por ser esta universidad una institución de la Compañía de Jesús, existe la identificación con la preferencia apostólica del papa Francisco y su exhorto al cuidado de la casa común, añadió.
«Nos parece interesante que estas opciones se discutan, se conozcan, se planteen como alternativa, que formen parte de las discusiones sobre la orientación que tiene que tener Venezuela. Ese es el sustento de la vinculación de la UCAB con el tema», dijo Benítez.
Mencionó que, como parte del convenio suscrito entre la UCAB y la Eco Alianza, existen tareas de formación con programas de estudio que tienen que ver con la profesionalización de la actividad ecoturística en el país a través del Centro Internacional de Actualización Profesional (CIAP-UCAB).
Por su parte, el vocero de la Eco Alianza remarcó la importancia de aprovechar la plataforma educativa de la UCAB para impartir cursos y diplomados que hagan sostenible la alianza. «El ecoturismo es mucho más práctica que teoría y hay que hacerlo, pero de a poquito, no de sopetón», puntualizó Pestana.
Aclaró Benítez que para ser operador de ecoturismo o administrar negocios de este tipo no es obligatorio formarse, pero para obtener certificaciones es necesaria la profesionalización, sobre todo porque ante la falta de supervisión prospera el greenwashing, establecimientos que se hacen pasar por «verdes» sin serlo.
«No es que no lo pueden hacer sin formarse, pero ese es el mejor camino. La UCAB y su plataforma educativa son ideales porque hay que pensar en que los operadores ecoturísticos pueden estar en sitios remotos del país y la capacidad de la universidad para ofrecer educación a distancia tiene su valor», indicó Benítez.
El director de Sustentabilidad Ambiental UCAB recalcó, además, el interés que existe para que el documento que se llevará al evento en España se elabore «con la más alta participación, incluyendo instancias del Poder Ejecutivo a quienes vamos a invitar. Necesitamos que ese proceso sea abierto, transparente y que la declaratoria final recoja todo ese esfuerzo».
Cree que hay una ventana de oportunidad para el desarrollo económico de los destinos ecoturísticos nacionales —con sus consecuentes efectos positivos sobre el empleo y la reducción de la pobreza— porque «el turismo masivo está siendo muy cuestionado en la Unión Europea y ya son varios los países que están tomando medidas para controlarlo».
Sobre los inventarios de localidades para ser explotadas con esta modalidad de turismo sustentable, Benítez dijo que, desde la academia, se han hecho levantamientos de recursos ecoturísticos en Venezuela, pero «con mucha timidez».
«Pareciera que lo que hace falta es un plan nacional, un diagnóstico, que parta de un plan de qué es más o menos lo que se puede hacer y que eso empiece a promoverse como una actividad», concluyó.
♦Texto: Elvia Gómez/Fotos: Eco Alianza (apertura) y Christian Lazo (retratos)