37 artistas visuales emergentes y 4 invitados especiales participan en esta muestra colectiva, titulada «Neo-contemporánea. Rupturas & Filiaciones», que incluye obras en distinto formato y con diversidad temática. Cuatro creadores fueron premiados y otros cinco recibieron menciones especiales. La exposición puede disfrutarse hasta finales de noviembre en la sede de la UCAB, en Montalbán
La feminidad, la discapacidad, la belleza; los dramas, cotidianidad y tragedias del país; el amor, el dolor, los cuestionamientos del hombre, así como aspectos de la comunidad LGBTIQ+, son algunos de los temas que abordan, desde distintos formatos y formas de expresión, las obras que hacen parte del 24° Salón Jóvenes con FIA.
La exposición de artistas visuales venezolanos emergentes se inauguró el viernes 27 de septiembre en el Centro Cultural de la UCAB, en Montalbán, en presencia de las autoridades de la universidad, miembros del comité organizador, representantes del cuerpo diplomático de Brasil y personalidades del ámbito cultural, además de profesores, estudiantes y empleados de la casa de estudios.
Las pinturas, esculturas, fotografías e instalaciones están a la vista del público en la Sala Magis y la Sala Experimental, ubicadas en el sótano del recinto expositivo de la universidad.
Pero en esta oportunidad, los jardines, el edificio de Laboratorios, el Pide Cola, la pasarela, LAGA (Academia de Gastronomía UCAB-Plaza’s), el oratorio y la fachada del edificio de Aulas del campus Montalbán también son espacios para la contemplación de las piezas que conforman la vigésima cuarta edición de esta muestra.
La exhibición colectiva, que lleva el título «Neo-contemporánea. Rupturas & Filiaciones», cuenta con la curaduría de la museógrafa e investigadora Tahía Rivero y reúne el trabajo de 37 exponentes nóveles y 4 invitados especiales.
El Salón es posible gracias a la Galería D’Museo y la Feria Iberoamericana de Arte, FIA, en alianza con la Dirección General de Cultura de la UCAB. Cuenta con el patrocinio de Fundación Telefónica Movistar, Banco Nacional de Crédito, Mercantil Seguros, Boom Art Community, Pineco, Empresas Polar e Iselitas.
Como cada año, un jurado galardonó a los mejores trabajos participantes. En esta oportunidad, el primer premio fue para Onai Quiñones y su obra «Res y todas las carnes»; el segundo lugar para Claudio Valdebenito, con «Espacio en blanco», y el tercer puesto lo consiguió Siul Rasse con «Cuando las aguas bajaron».
Además, por su trabajo sobre la migración, Freisy González obtuvo una residencia en España, de la mano de Boom Art Community, gracias a su obra fotográfica «De nuestros movimientos forzados».
Adicionalmente, el jurado concedió menciones especiales a los participantes Carlos Luis Sánchez, Diana Leal, Édgar Martínez, María Elena Pombo y Salomé Rojas.
El panel de expertos, que revisó y evaluó detalladamente las obras, estuvo conformado por Alberto Asprino (promotor, curador, museógrafo y asesor), Sagrario Berti (historiadora de fotografía e investigadora de la cultura visual contemporánea) y Carmen Alicia Di Pasquale (curadora, profesora e investigadora en Filosofía y Teoría visual.
Premio a la resiliencia: hablan los ganadores
De la sorpresa a la gratitud, pasando por la satisfacción por el trabajo realizado, los triunfadores del 24° Salón Jóvenes con FIA conversaron sobre el significado de participar en esta colectiva y de haber sido galardonados con los máximos premios de esta edición.
Para Onai Quiñones, quien obtuvo el primer lugar por su obra «Res y todas las carnes», este premio lo impulsa a seguir en su búsqueda artística. Manifestó que la pieza simboliza la empatía a partir de la carne, material orgánico del que todos estamos compuestos.
«Yo me baso en teorías, estoy hablando de lo que planteó el filósofo francés Maurice Merleau-Ponty acerca de la carne», explicó el artista merideño.
«Estoy muy centrado en mi trabajo; en lo que yo podía aportar con la pintura. Es una especie de reivindicación de la pintura. Aún no comprendo lo que significa esto para mí. Ya venía con mucha satisfacción por todo el esfuerzo que ameritó la obra, todo lo que entregué en ella representa el tope de lo que puedo dar ahora. Estoy muy orgulloso de ello. Estoy muy agradecido con todo», señaló Quiñones.
El autor de «Espacio en blanco», Claudio Valdebenito, merecedor del segundo puesto, señaló que el reconocimiento es importante porque representa una recompensa a los altibajos que ha vivido como artista.
«He venido de períodos anteriores de mucha resiliencia, de intentarlo, de caerme y levantarme. Pero siempre he estado convencido de que la respuesta está en mi arte, en mí, y desde allí tomé la fortaleza de hacer arte en este país», recalcó.
«Es un honor muy especial. La obra es un dispositivo, una nevera, que encierra muchas imágenes que sirven de espejo de nuestra realidad, sobre todo del ámbito cultural y académico, porque muchas veces el alimento que tienen son los libros y el conocimiento. Hay un poco de trabajo autobiográfico. Creo que es importante decir la verdad sobre lo que está pasando, un llamado de atención y desde allí despertar y construir un mejor país», dijo Valdebenito.
Siul Rasse, ganadora del 3er lugar con su obra «Cuando las aguas bajaron», comentó que participar en el salón constituye «un sueño». Con unas piezas tejidas -ubicadas en el oratorio del edificio de Aulas- representó la tragedia de Vargas (1999) desde su propia experiencia, como sobreviviente de aquel desastre natural.
«Es como un viacrucis, una visión general de algo que yo viví cuando tenía 11 años de edad. Lo rescato y lo traigo de nuevo porque es algo que no debemos olvidar. El oratorio es el espacio ideal para ellas porque es un lugar contemplativo, de silencio y de oración. Las piezas, justamente, son para ser contempladas en silencio», puntualizó.
Por su parte, Freisy González -quien se hizo acreedora de la residencia artística en España- comentó que su trabajo lo realiza desde 2017, tras su propia experiencia como migrante que decidió regresar a su país.
«Me parece que ha sido inevitable tocar el tema y el hablarlo, plasmarlo en otros materiales, propone un diálogo que nos invita a todos a reflexionar acerca de lo que es migrar, cómo se siente. Este premio es bien interesante porque significa un viaje, otro movimiento es muy chévere», indicó la también fotógrafa y antropóloga que presentó «De nuestros movimientos forzados» .
Los artistas que consiguieron los tres primeros lugares recibieron un premio en metálico, que va de los 1.000 a los 2.500 dólares, gracias al aporte del Banco Nacional de Crédito.
Mariela Cabrera, vicepresidenta ejecutiva de Productos y Servicios del BNC apuntó que para la institución bancaria es importante ser parte de estas iniciativas.
«La idea es acompañar las innovaciones e ideas, así como la promoción del arte y la cultura; sobre todo espacios de innovación y creatividad, porque es parte de lo que el BNC fomenta con sus alianzas con la UCAB y con la propia misión y visión del banco».
Jóvenes con FIA: testimonio contemporáneo del hombre
Los formatos y tamaños son variados en este salón.
Cerámica, tejidos, dibujo, una construcción en bahareque, pintura, fotografía, mix media, instalaciones, escultura, intervenciones, videoarte, video performático y performance (que pudo apreciarse durante la inauguración) son algunos de los medios que conforman esta edición del Jóvenes con FIA.
De acuerdo con la curadora, Tahía Rivero, la escogencia de los artistas fue un proceso fluido. Explicó que, a partir de una amplia red de contactos, comenzó a reunirse con ellos.
Inicialmente, la propuesta consistía en invitar a 30 creadores, pero los 37 contactados concretaron su interés por participar.
«A medida que iba viendo las obras -sus materiales, temas y constitución- hizo que calzaran los dos grupos que tenía: Mundos Conectados (en la Sala Experimental) que tiene que ver con lo urbano, pero también con lo periférico, con las ciudades del interior; y las Identidades Híbridas (Sala Magis) que se desplazan, que están en constante cambio: el cuerpo como repositorio de esa identidad que se desplaza; el cuerpo enfermo, vulnerable, transformado, fragmentados. Este es el semillero de lo que será el panorama artístico mañana, es importante mostrarlo, para que el país tenga la mirada hacia el arte; el interés por mantener el salón es muy estimulante y habla muy bien de esta sociedad que valora el arte como testimonio histórico del hombre», afirmó Rivero.
Los artistas cuyas obras dan vida a esta exposición son Valentina Aguirre, Dania Bucko, Jhonathan De Aguiar, Rubén Echeverría, Gabriela García, Freisy González, Pülashi González, Diana Leal, Manuela Márquez, Édgar Martínez, Carelyn Mejías, Santiago Méndez, David Molina, Alejandro Pantin, Gabriel Pinto; Wiki Pirela, Ronald Pizzoferrato, María Elena Pombo, Juan Portillo, Onai Quiñonez, Siul Rasse, Salomé Rojas, Carlos Luis Sánchez, Santiago Sifontes, Laura Silva, Francisca Sosa, Ander Szinetar, Mikel Szinetar, Matías Toro; Claudio Valdebenito, Conrado Véliz, Lucía Vera, Javier Vivas, Julian Waldman, Manuela Zárate y Stefano Di Cristofaro. Algunos de ellos, cabe destacar, están fuera del país, pero enviaron sus obras para la exposición.
Los invitados especiales son Tecla Tofano, Diana López, Franco Contreras y Luis Salazar.
La UCAB, el arte y el diálogo intergeneracional
Durante la inauguración, que se celebró a casa llena, el rector de la UCAB, Arturo Peraza, S.J., celebró la mirada analítica de los jóvenes artistas participantes en el Salón.
Señaló que en sus obras se observa una «deconstrucción» de la realidad, que muestra que «algo se está fracturando» y «no puede continuar de la misma manera».
«Ustedes lo graficaron de mil formas; nos vinieron a decir como jóvenes que lo que aparenta, lo que se quiere aparentar como estabilidad, modo de ser, no lo es y quizá hay más fracturas. Y ustedes, desde su sensibilidad, nos empiezan a llamar la atención sobre esa fractura. Pero esas fracturas están buscando una nueva identidad. Yo percibo un país que está profundamente fracturado desde hace tiempo. Y estamos en búsqueda de una nueva identidad. Los jóvenes tienen la palabra», afirmó Peraza.
Entretanto, el director general de Cultura UCAB, Dizzi Perales, S.J., expresó su satisfacción porque la exposición haya sido posible, gracias al trabajo mancomunado de varias organizaciones, «en estos tiempos en los que la producción cultural es muy cuesta arriba».
También manifestó su alegría porque el Salón haya tomado múltiples espacios de la universidad ya que, dijo, la distribución de las piezas guarda relación con su planteamiento.
Reiteró que el campus UCAB es un espacio para el disfrute del arte, no solo por parte de la comunidad ucabista, sino de las comunidades aledañas y el público general.
«Nos parecen interesantes las temáticas que inquietan a los jóvenes artistas; sus preocupaciones, los temas que los llaman a los reflexión; qué los ilusiona, qué los inquieta, qué se convierte en una crítica o en una posibilidad de celebración. Tenemos 37 discursos que se generaron desde diferentes formatos, propuestas que nos apasionan, conmueven y nos inquietan. Ese dialogo con las generaciones jóvenes es importante. El país se construye con ese tejido intergeneracional», afirmó.
El 24° Salón Jóvenes con FIA estará abierto hasta el 30 de noviembre de este año. La entrada es libre y se podrán ver las obras de lunes a viernes, de 8:30 a.m. hasta 4:30 p.m.
En el marco de la exposición, durante los próximos meses se llevarán a cabo tertulias, conferencias, visitas guiadas y actividades para las comunidades cercanas al universidad. Todas serán anunciadas a través de @culturaucab y @galeriadmuseo.
A continuación una fotogalería de la exposición:
♦Texto: Grace Lafontant León/Fotos: Manuel Sardá, Fabián Giampaoletti y Jéssica Borges