Ante la comunidad ucabista, el sacerdote jesuita invitó a todos a echar la vista atrás y agradecer a Dios «por tanta gente, tanto esfuerzo y tanto desarrollo que ha habido a lo largo de estos 71 años». Reivindicó que, desde su fundación, la universidad ha ofrecido al país propuestas y soluciones creadas con la sabiduría, la ciencia y el amor

Todo el equipo de la Universidad Católica Andrés Bello ha competido consigo mismo para hacer más y mejor a lo largo de sus 71 años de existencia. «El magis nos persigue», afirmó el rector de esta institución, Arturo Peraza Celis, S.J., al contextualizar el esfuerzo de la UCAB en su propósito por alcanzar la mayor calidad en todo lo que se hace, tal como lo estipuló el fundador de la Compañía de Jesús, san Ignacio de Loyola.

«Celebramos 71 años llevando alternativas (….), lo que queremos celebrar son 71 años de amor», insistió el padre Peraza en un breve mensaje de siete minutos que ofreció durante la misa de acción de gracias que, este jueves 24 de octubre, congregó a buena parte de la comunidad ucabista en la parroquia universitaria «María Trono de la Sabiduría».

«Celebramos el esfuerzo colectivo que hacemos para transmitir el espíritu de Dios a nuestro país, marcado de muchos nombres que pusieron todo lo que pudieron para que llegáramos a donde estamos».

Reiteró el rector que la aparición en rankings internacionales que ubican a la UCAB en puestos muy relevantes, en comparación con sus pares del país y del continente, «no es un objetivo pretendido», sino la consecuencia del trabajo realizado, pues lo más importante es «brindar calidad con inclusión».

Mencionó Peraza, especialmente, dos de las muchas alternativas ofrecidas al país por el genio de la comunidad ucabista: la creación del Centro de Salud Santa Inés, que este 2024 cumple 25 años en el Parque Social, hasta el más reciente anuncio de la constitución de la Academia Blockchain, Trading & Cripto, inaugurada el miércoles 23.

Con Peraza, la eucaristía del septuagésimo aniversario de la UCAB fue celebrada por los sacerdotes jesuitas y docentes de la UCAB Jesús María Aguirre, Danny Socorro, César Muziotti y Dizzi Perales. El vicerrector académico, José Francisco Juárez, y la directora de la Escuela de Ingeniería Civil, Patricia Pereira, participaron en las lectura y peticiones.

El amor transformador

En la homilía, el rector de la UCAB destacó el espíritu de agradecimiento que debe embargar a todos y cada uno de los que han sido parte de la historia de la Universidad Católica Andrés Bello, desde su fundación en 1953 hasta el presente, desde sus puestos como empleados de mantenimiento hasta los máximos cargos académicos.

«Lo que hemos hecho es decirle a la gente: se te quiere», explicó el sacerdote que sucedió al padre Francisco José Virtuoso, fallecido en el cargo en 2022, y quien fue recordado en este encuentro del 71 aniversario.

«Es un conglomerado inmenso de personas las que hoy traemos cuando hablamos de 71 años y es difícil compendiar ese proceso  y es toda la gente que hoy, de distintas maneras y formas, está haciendo caminar a nuestra universidad en un contexto que, ni es sencillo, ni es fácil, pero que hacemos el esfuerzo de impulsar y seguir hacia adelante porque llevamos algo que es un tesoro valioso«, reflexionó la máxima autoridad de la UCAB.

El «tesoro escondido» fue una de las sagradas escrituras seleccionadas para celebrar la efeméride (Mateo 13:44, que señala que «el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo, el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por ello va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo»).

Peraza invitó a todos a echar la vista atrás y agradecer a Dios «por tanta gente, tanto esfuerzo y tanto desarrollo que ha habido a lo largo de estos 71 años».

El rector habló del contexto nacional «profundamente hostil» para el quehacer universitario y afirmó que uno de los objetivos es que en el espacio que ofrece la UCAB «la gente consiga vida y plenitud«. Recordó que en la Universidad Católica Andrés Bello el ambiente siempre ha sido «de calidez, cercanía, capacidad de escucha«.

Añadió que, «ante una realidad atemorizante», cuando se vive enamorado de lo que se hace, se descubre algo clave para enfrentar la hostilidad, porque «desde el amor se puede reconstruir la realidad» y «podemos crear un mundo alternativo».

La UCAB: un bastión más hondo que el juego dicotómico político

Arturo Peraza llamó a todos a reconciliarse con la propia historia y a superar los rencores y las cuentas por cobrar,  «que terminan por amargar». En el caso de la UCAB, señaló que con el conocimiento y la ciencia se puede resistir la violencia, el sometimiento y el miedo; y que lo que da sentido a todo el trabajo diario en esta universidad es la construcción de alternativas a esa realidad.

Reivindicó que la UCAB se ha convertido «en un bastión mucho más hondo que el juego dicotómico político en el que se vive globalmente, donde te obligan a tomar posiciones y, en el fondo, son violencia o violencia».

Para finalizar su reflexión, el padre Arturo Peraza aseveró que «el amor es lo único que puede transformar» y aseguró que todos los miembros de la comunidad ucabista han sido portadores de ese cariño. «Eso nos da conocimiento de la vida, la raíz de las cosas».

Al culminar la misa, las autoridades de la UCAB, acompañadas de estudiantes, profesores y empleados, disfrutaron de una presentación artística y cantaron cumpleaños a la institución, a la vez que brindaron para que la universidad siga cumpliendo la misión encomendada cuando abrió sus puertas el 24 de octubre de 1953: formar integralmente a la juventud venezolana y contribuir con el desarrollo nacional. 

♦Texto: Elvia Gómez / Fotos: Manuel Sardá