En 1985, Pestana se convirtió en el primer estudiante de la Escuela de Ingeniería Civil de la UCAB en graduarse con promedio de notas casi perfecto. Profesores y compañeros rindieron tributo a este profesional, fallecido en septiembre, quien destacó internacionalmente como investigador, docente y consultor en el área geotécnica y se mantuvo vinculado a su alma mater, pese a haber emigrado hace casi 40 años
Cuando Juan Manuel Pestana Nascimento (1963-2025) se tituló como ingeniero civil en la Universidad Católica Andrés Bello, en 1985, sin saberlo estaba haciendo historia.
Gracias a un promedio de notas de 19,48/20 puntos, el entonces joven de 22 años se convirtió, junto a un compañero de promoción, en uno de los dos primeros graduandos de la Escuela en obtener la distinción summa cum laude.
Cuatro décadas después, este honor es ostentado por unos pocos. “De acuerdo a los registros de la Facultad, en 72 años la Escuela solo ha tenido cuatro summa cum laude y ocho cum laude”, comentó Patricia Pereira, directora de la dependencia, dando cuenta de la rigurosidad y exigencia de la carrera.
El logro de aquel muchacho sería solo el primero de muchos y expresión del “extraordinario desempeño académico”, que, según sus profesores, mostró durante sus años de estudiante de pregrado.
“Como alumno, además de respetuoso, siempre aportaba datos que complementaban la exposición del profesor, dada su dedicación al estudio de la materia”, afirmó Pedro Carrillo Pimentel, quien le dio clases de Ingeniería de Fundaciones en el noveno semestre.
El veterano ingeniero (egresado de la UCAB en 1967) recordó con “orgullo” su “liderazgo en el curso” y el “estímulo al estudio de la materia que le transmitió a sus compañeros”.
En esto coincidió Nelson Rodríguez, su docente temporal en el curso de Mecánica de Suelos II. Destacó sus “frecuentes intervenciones y profundidad de sus interrogantes” en clase como “presagio” de lo que sería su “brillante formación académica de postgrado y doctorado”.
De Caracas a Boston, del MIT a UC Berkley
En su tiempo de estudiante, Juan Manuel Pestana fue preparador de varias asignaturas. Y durante el año siguiente a su grado en la UCAB, trabajó en la Escuela que lo formó como profesor asistente de Mecánica de Fluidos y Laboratorio de Mecánica de Suelos I y II.
Sin embargo, sus ambiciones académicas lo llevarían, en 1986, a emigrar del país y mudarse a Boston para cursar una maestría en Ingeniería Geotécnica en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), una de las universidades más prestigiosas de ese país y actualmente la mejor del mundo, según rankings internacionales como el QS.
En esa casa de estudios también obtendría el doctorado en la misma área, en 1994.
“Su récord académico es el más aburrido que he visto en mi vida; a excepción de una o dos materias, solo tenía una calificación en toda la página. Y sin embargo se le veía ansioso, preocupado por vivir lejos de su familia y por la fama de altísimo nivel académico del MIT”, comentó Eduardo Mier y Terán, excompañero de clase en la UCAB y amigo por más de 40 años.
“Hoy pienso que el MIT debe darle gracias a Juan por haber contribuido de la manera que lo hizo al nombre de la universidad, incluyendo su modelo matemático de comportamiento de suelos, MIT S1”, agregó el también ingeniero civil.
Concluida su formación en el Tecnológico de Massachusetts, Pestana ingresó a la Universidad de California Berkley (UC Berkley), donde hizo carrera docente y de investigación en el Departamento de Ingeniería Civil y Ambiental.
Durante 23 años dictó varias asignaturas, publicó más de 150 artículos científicos y se desempeñó como mentor y tutor de tesis de grado.
Gracias a ese compromiso, la UC Berkley le concedió en 2010 el “Premio a la Enseñanza Distinguida”, máximo galardón a la excelencia docente de esa casa de estudios.
A este reconocimiento se le sumaron otros, de instituciones como la National Science Foundation y la American Society of Civil Engineering, también en Estados Unidos.
“Me contó una vez que las evaluaciones que los estudiantes hacían de los profesores consistentemente lo calificaban en el tope de la Facultad. Que eso por supuesto le gustaba, pero que lo obligaba moralmente a no defraudar a los siguientes estudiantes que tomaban su clase porque se corría la voz”, rememoró Mier y Terán.
“Un referente de la geotécnica venezolana internacional»
Pestana se retiró de UC Berkley como “profesor emérito”, en el año 2017, para dedicarse de lleno a la consultoría profesional en el área geotécnica, trabajo que venía ejerciendo en paralelo a sus labores académicas desde su graduación en la UCAB.
Gracias a esto formó parte de proyectos importantes en Venezuela, Estados Unidos y otros países de los cinco continentes.
En 2021, regresó a las aulas de clase como profesor de postgrado en la Tufts University, ubicada cerca de Boston, donde impartía sus conocimientos en ingeniería geotécnica sísmica.
Para la fecha de su fallecimiento, el ingeniero ucabista se desempeñaba como director senior de Geosyntec Consultants, firma internacional de ingeniería con clientes y proyectos en países en todo el mundo, desde Canadá hasta Australia, pasando por España o Arabia Saudita.
“El doctor Pestana participó exitosamente en consultorías y en la elaboración de un sinnúmero de proyectos geotécnico-estructurales de alta complejidad en varias partes del mundo, lo que permitió su afianzamiento como un reconocido referente en la disciplina”, aseveró Nelson Rodríguez, también especialista en esta área.
“Era brillante y se desempeñó, entre otros, en el campo del modelaje matemático. Tuvo una participación relevante en la evaluación de las fallas de los diques de la ciudad de New Orleans, donde presentó trabajos inéditos”, añadió, por su parte, el ingeniero Pascual Perazzo, quien no dudó en calificarlo como “referente de la geotecnia venezolana internacional”.
Particularmente, Perazzo mencionó su colaboración en el Proyecto Miguillas, central hidroeléctrica que se construye en Bolivia.
“Me ayudó en la interpretación de resultados del modelaje de los túneles hidráulicos del proyecto presentados por el contratista”, apuntó.
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Juan Pestana y la UCAB: un vínculo a prueba del tiempo
“A Juan, como a muchos estudiantes de ingeniería de la UCAB, le faltaba tiempo”, relató Eduardo Mier y Terán sobre las muchas cosas que hacía su amigo, lo que –aseguró- nunca le impidió dedicarse a aficiones como tocar el piano, instrumento que también estudió formalmente.
“Se interesaba en todo. Si hablabas con él de historia, geografía, literatura, política, religión, deportes, música o la película de 007, siempre era una conversación agradable”, sostuvo.
Ese espíritu multifacético queda confirmado en su hoja de vida porque, además de docente, académico y consultor, Pestana también fue conferencista y voluntario en distintas organizaciones, entre ellas una dedicada a la promoción del liderazgo de los profesionales y ejecutivos latinos en Estados Unidos.
“Juan siempre invitaba a sus estudiantes extranjeros ‘desamparados’ a pasar el Día de Acción de Gracias en su casa. En alguna ocasión me dijo que fue una costumbre que adoptó para él dar gracias”, continuó Mier y Terán.
Precisamente el agradecimiento con la UCAB lo hizo mantener una relación permanente de colaboración con esta casa de estudios, a pesar de la distancia.
“Frecuentemente era invitado a participar como ponente en las Jornadas de Ingeniería Civil organizadas por el centro de estudiantes. Siempre que le era posible, asistía, pues consideraba fundamental mantener el contacto con su alma mater y contribuir a la formación de los futuros ingenieros civiles”, afirmó la directora de la Escuela, Patricia Pereira.
La profesora precisó que fueron muchos los tesistas a los que brindó asesoría en los trabajos de grado relacionados con su área de experticia.
Por eso y más, cree que la figura de Juan Manuel Pestana merece ser recordada y emulada por las nuevas generaciones de ucabistas.
“La vida de Juan nos enseña la importancia de la disciplina, organización, curiosidad, humildad y gratitud. Las nuevas generaciones deberían emular su pasión por lo que hace, su valentía ante los desafíos y su constancia para alcanzar metas. Sobre todo, su ejemplo destaca la necesidad de vivir una vida plena, equilibrando familia, amigos, estudios y trabajo”, resaltó.
♦Texto: Efraín Castillo/Fotos: Sociedad Mexicana de Ingeniería Geotécnica (apertura), UC Berkley, The Mercury News y Linkedin (internas)
(Esta semblanza se realizó a partir de los testimonios que las personas citadas enviaron por escrito, además de la revisión de material informativo disponible en distintos portales web)
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