Cada 22 de abril se celebra en todo el mundo el Día Internacional de la Tierra, fecha institucionalizada por la Organización de Naciones Unidas con el objetivo de concientizar a la población sobre la urgencia de «alcanzar un justo equilibrio entre las necesidades económicas, las sociales y las ambientales de las generaciones presentes y futuras, y para promover la armonía con la naturaleza y la Tierra», según se lee en la página web oficial sobre el tema.

Como parte del plan estratégico UCAB 20-20, la Dirección de Sustentabilidad Ambiental de la Universidad Católica Andrés Bello  planea, coordina y ejecuta continuamente actividades que buscan fortalecer la cultura del desarrollo sostenible entre los miembros de la comunidad ucabista  así como entre los habitantes de las zonas aledañas a la casa de estudios.

Pero la UCAB trabaja en pro del desarrollo sustentable no solo porque así lo indican sus planes estratégicos o los de la Asociación de Universidades confiadas a la Compañía de Jesús en América Latina (AUSJAL) a la que pertenece.

La Católica también realiza estas actividades como parte de un compromiso  de cara a las futuras generaciones.  «Es una forma de mostrarle al país cómo lo soñamos en un futuro», expresó Joaquin Benítez, director de la Dirección de Sutentabilidad Ambiental de la UCAB, en una carta dirigida a la comunidad ucabista. 

En su cuenta de Twitter, @UCABSustentable, la dependencia divulgó recientemente algunos consejos que los ciudadanos comunes pueden poner en práctica para contribuir a la propagación de una cultura sustentable. Las acciones, si bien parecen insignificantes, crean pequeños aportes. A continuación, unas cuantas:

  • Utilizar el transporte público. La mayor parte del dióxido de carbono (CO2 por su fórmula química) acumulado en el ambiente proviene del sector del transporte. Al utilizar trenes y autobuses minimizamos la cantidad de gases generados. Caminar o usar bicicletas también supone una opción no solo ecológica, si no saludable.

  • Apartar los desechos orgánicos. Desperdicios como conchas de plátano, tomate, lechuga e incluso semillas son un excelente abono para plantas, pues carecen de fertilizantes y pesticidas. Arrojarlos a la tierra, en vez de en vertederos de basura reduce considerablemente la cantidad de residuos. 

  • Eliminar las bolsas plásticas. El plástico tarda entre 100 y 1000 años en descomponerse, por lo que es más conveniente utilizar bolsas ecológicas de tela. Además de ser reutilizables, soportan más peso que las bolsas comunes.

  • Reducir el consumo de agua. Usar tobos con agua a la hora de lavar carros o regar jardines es una acción ecológica que significa hasta un 60% de ahorro de agua con respecto a la cantidad gastada con el uso de mangueras.

  • Ajustar equipos de aire acondicionado. Cada grado de temperatura que se le sube al termostato significa un 5% de ahorro de energía eléctrica. Ajustar el aire acondicionado a 21° y la calefacción a 25° optimiza el uso de recursos utilizados.

¿Qué hace la universidad por el medioambiente?

La Dirección de Sustentabilidad Ambiental de la universidad es la encargada de planear, realizar y controlar sistemáticamente las actividades ecológicas y el impacto ambiental generado por la UCAB y sus entidades.   Acá algunas de las acciones que  emprende  desde la docencia, la investigación, la extensión social y la gestión en sus sedes.

 

♦Mariann Clareth Palacios