Escrito por los profesores José Humberto Gómez  y Víctor Sánchez Taffur, el volumen se aproxima a la vida y obras emblemáticas del reconocido arquitecto caraqueño. El texto es el primero de una colección que la Escuela dedicará a quienes han recibido el Premio Nacional de Arquitectura

El pasado jueves 30 de noviembre, representantes de la Escuela de Arquitectura de la UCAB, junto con autoridades de la Facultad de Ingeniería, bautizaron el primer libro de su colección Premios Nacionales de Arquitectura. Se trata de Gustavo Legórburu y la conciencia del lugar, escrito por el director de la escuela, José Humberto Gómez, y el jefe de la Cátedra de Diseño de esa dependencia, el profesor Víctor Sánchez Taffur.

“Gustavo Legórburu Rodríguez perteneció a esa estirpe de arquitectos y docentes venezolanos que no dudaríamos en catalogar como excepcionales para cualquier estudio que se emprenda sobre la arquitectura nacional. Su obra, desarrollada en la segunda mitad del siglo XX,  se torna imprescindible para comprender lo que fue un momento histórico de la profesión en nuestro país», narran los autores en el preámbulo del libro, editado por abediciones, sello de la UCAB.

Nacido en Caracas en 1930 y fallecido, también en la capital venezolana, en 2013, Legórburu desarrolló una vasta carrera en el desarrollo de proyectos institucionales, residenciales y urbanos, además de que tuvo una importante trayectoria como docente universitario en instituciones como la UCV y la USB. En 1989 recibió el Premio Nacional de Arquitectura.

El volumen, que también cuenta con el aval de Ediciones FAU-UCV, de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Central de Venezuela, es la primera publicación sobre maestros de la arquitectura venezolana que la Escuela de Arquitectura UCAB tiene previsto lanzar a partir de ahora, con el propósito de homenajear a aquellos que hicieron a este país.

“Alguien dijo alguna que vez que terminamos de morir el día que muere la última persona que nos recuerda y pensamos que este libro puede ayudar a que eso no ocurra”, afirmó el director de la Escuela de Arquitectura, José Humberto Gómez, durante la presentacion del libro.

Este proyecto se había ideado desde hace aproximadamente 20 años hasta que, finalmente, se logró concretar, «a pesar de que requirió de mucho tiempo y esfuerzo», añadió Gómez.

 

 

Por su parte, el profesor Víctor Sánchez Taffur habló de la importancia de resaltar la arquitectura venezolana que, aseguró, en ocasiones es ignorada.

 

«Con los años entendí la necesidad de que nosotros tenemos que hacer una arquitectura que sea nuestra y, para lograrlo, hay que mirar a los que ya lo han hecho. En muchos casos, pensamos que eso no es importante y preferimos ver revistas, impactarnos por el  último edificio construido en tal lugar y resulta que tenemos ejemplos de muy buena arquitectura en el país».

Sánchez Taffur también mencionó que la intención es que este texto le sirva  al estudiante, no solo para leerse la vida de un personaje ilustre de la profesión,  sino también para entender «cómo a partir de sus estudios, de su manera de enfrentar los problemas, él hizo arquitectura”, enfatizó el profesor.

Gustavo Luis Legórburu, hijo del arquitecto homenajeado en este texto, participó en la presentación del libro, mostrándose muy emocionado y agradecido por este proyecto que honra la memoria de su padre.

«Este libro representa muchas cosas: la primera, una deuda que tenemos con papá y la segunda, una emoción muy grande. Mi papá fue una figura importante en mi vida, no solo como padre, sino porque fue mi maestro. Muchas de las cosas que aprendí fue por su enseñanza y mucho de lo que hago está influido por su pensamiento. La tercera es que tiene un legado importante que debe ser compartido. La idea de una arquitectura para el país, una arquitectura que tiene conciencia del lugar, de las condiciones climáticas, naturales y sociales, son valores que todavía están vigentes», señaló.

Dos aspectos significativos de Legórburu en 250 páginas

Esta publicación es una edición bilingüe (español-inglés) de 250 páginas, compuesta por dos partes. La primera consta de  cuatro capítulos, los cuales relatan la vida de Legórburu y su labor docente en la Facultad de Arquitectura de la UCV. Además presenta testimonios en primera persona del propio arquitecto.

“Hablamos de un docente apasionado, elocuente, agudo e inquieto, y un estudioso de la sociedad en la cual le tocó vivir: ese fue el profesor Gustavo Legórburu Rodríguez, quizá la enseñanza era una vocación que descubrió en la necesidad de comunicar con su verbo y sus gestos, producto de sus extrovertido carácter, pero también en la necesidad de transmitir a los más jóvenes unas particulares inquietudes sobre el ejercicio de la disciplina en nuestro país”, relatan los escritores en uno de los capítulos.

La segunda parte posee cuatro apartados antecedidos por un texto introductorio, donde se describe la obra del arquitecto. Luego se encuentran los capítulos que abordan 14 de sus proyectos emblemáticos en el área institucional, corporativa, residencial y urbana, y además se muestra un levantamiento de tres obras paradigmáticas de tres periodos distintos.

Entre varios de sus trabajos se cuentan el Ateneo de Caracas, hoy Unearte, en Bellas Artes, Caracas; el Centro de Atención Nutricional Infantil de Antímano, CANIA, en Caracas; la Torre del Banco del Orinoco en la avenida Francisco de Miranda, Caracas; la sede del Instituto Politécnico de Barquisimeto, en Lara, y el Monumento a la Agricultura, en Acarigua, Portuguesa.

El libro Gustavo Legórburu y la conciencia del lugar, publicado por la Escuela de Arquitectura de la UCAB  y el sello abediciones, estará a la venta en varias librerías de Caracas y el resto del país, entre ellas Kalathos, Tecniciencia, El Buscón y en la librería de la UCAB.

♦Texto: María Alejandra Fernández /Fotos: Manuel Sardá