Tecnológico, curioso y feliz de enseñar a otros. Con estas tres características se presenta Raikjars Africano, estudiante de quinto semestre de Ingeniería Informática que ama su carrera y, con solo 21 años, demuestra cómo llevar los valores ucabistas, pues a la par de sus actividades académicas, da pasos más allá y participa en actividades de promoción de la universidad, disfruta motivando a sus compañeros a descubrir su potencial y forma parte del club de robótica de su escuela, a través del cual desafía su imaginación y pone a prueba sus capacidades.

Su amor por el mundo de la programación comenzó cuando era muy pequeño, revisando las partes de las computadoras viejas de su casa. Con el pasar de los años, se dio cuenta de que esa área de ingeniería le gustaba mucho y en quinto año de bachillerato se inscribió en la UCAB.

«Siempre me llamó la atención el área tecnológica, cuando era más pequeño me interesó la modificación de códigos en algunas de las aplicaciones que tenían las antiguas computadoras de mi mamá y por ahí siempre me fui por el área de la información y la informática. Luego, en la UCAB, que me queda relativamente cerca de mi casa, noté que me daban esa área que me interesaba y por eso opte por estudiar acá»  

Su apoyo al alumnado comenzó en el año 2016, cuando decidió  formar parte del Centro de Estudiantes de Ingeniería, integrando el comité de emprendimiento, una rama completamente nueva que se encargaba de ofrecer actividades que potenciaran el talento de los estudiantes.

«Una de nuestras primeras propuestas fue retomar lo que se conoce como ‘La Semana del Ingeniero’, en donde varias empresas ofrecían charlas para que los estudiantes pudiesen tener un intercambio de conocimiento. Fue ahí cuando me di cuenta que me gustaba hacer actividades de este estilo y decidí involucrarme más y hacer otras».

Su siguiente paso fue un poco más grande, se incorporó al equipo de mercadeo de su escuela, dando charlas y aportando ideas que pudieran llamar la atención de los futuros bachilleres y hacerlos interesarse por su carrera. Desempeñando este rol descubrió el amor que siente por enseñar a otros, habilidad que aprendió desde muy pequeño gracias a sus madre, quien es educadora.

Poco a poco se fue involucrando más y terminó coordinando junto a otros compañeros, y con el apoyo de algunos profesores, Ucabista por un Día y Experiencia UCAB, iniciativas impulsadas la Dirección de Mercadeo Institucional de la UCAB en donde ofrecen a los estudiantes de bachillerato la oportunidad de tener un acercamiento con su carrera de interés.

«Estando ahí (en el equipo de mercadeo) no tenía muy claro lo que hacíamos. Poco a poco fuimos aprendiendo y fuimos implementando actividades que nos gustaran a nosotros y que le pudieran gustar a los estudiantes, pensando qué pudieran aprender o qué pudieran ver de la informática para que se dedicaran a esa área. También, con ayuda de los profesores y la Escuela, empezamos a realizar cursos para que los estudiantes que ya estaban en la universidad no olvidaran por qué les gusta esta carrera».

Actualmente Raikjars Africano forma parte del Club de Robótica de la UCAB, asociación conformada por estudiantes de distintos semestres de ingeniería informática que se unieron con el propósito de revivir una iniciativa con mucho potencial dentro del campus: la creación de prototipos de máquinas automatizadas con funciones en muchas áreas.

«Es una experiencia de crecimiento personal. Aprendes muchas que quizás no aprendes en las clases y te puede ayudar a aprender más de lo que te gusta. Esas oportunidades que te puede ofrecer la universidad para que mejores y aprendas más allá de lo que anotas en un cuaderno o escuchas en un aula son las que debemos aprovechar porque te hacen crecer y, además, te enseñan a trabajar con otras personas, algo muy importante en informática»

A pesar de pertenecer a varias agrupaciones, Raikjars no descarta la posibilidad de realizar voluntariado. En un futuro espera seguir contribuyendo con la universidad, aportando ideas que motiven a sus compañeros a dar más de sí.

Por eso, invita a todos los jóvenes a que investiguen y busquen alternativas para que descubran su pasión y, aún más importante, su vocación. 

«Me parece importante ocupar un poco de tu tiempo en otras cosas, es decir, si vas a estudiar no dediques todo tu tiempo en eso sino que expandas tu área o tu visión para que veas qué otras cosas te puede ofrecer la carrera. También, me parece importante saber lo quieres. No importa si parece muy difícil, solo te llama la atención o tienes curiosidad sobre ello entones inténtalo, estúdialo y ve si realmente eso es lo que quieres estudiar y ve hasta el final»

♦Texto: María José Rodríguez/Foto: Andrea Alas