Los datos de la Encuesta sobre Condiciones de Vida (ENCOVI), correspondientes al año 2016, mostraron que la pobreza creció en Venezuela durante el último año: 81,2% de los hogares se encuentran en estado de carencia. Este número representa un aumento de 8,1% y 34,1% en relación con los resultados de 2015 y 2014, respectivamente.
Otro tema destacado tiene que ver con la seguridad. ENCOVI 2016 mostró que los jóvenes son los más afectados por el hampa: de 28.479 muertes violentas que hubo en 2016, se estima que 21.643 personas tenían menos de 35 años.
Igualmente, el estudio evidenció que la alimentación está en estado crítico: 74,3% de las personas entrevistadas manifestaron que, en promedio, perdieron 8,7kg en el último año. De este grupo, 86,3% manifestó que comía dos o menos veces al día. Este dato podría relacionarse directamente con una nueva variable que apareció en esta encuesta: el 3,9% de los participantes señaló que padecen desnutrición. Esto no se había visto reflejado en la ENCOVI 2015.
En el área educativa persisten las inequidades sociales. Casi la mitad de la población entre 3 y 5 años del quintil más pobre no tiene acceso a la educación. Por su parte, solo 1 de cada 5 jóvenes entre 18 y 24 años del quintil más pobre logra acceder a la educación.
Desde 2014, un equipo técnico conformado por profesionales de la USB, UCV y UCAB ha realizado la ENCOVI. A través de ella, se ha producido una serie de datos que permite identificar los principales problemas que vulneran los derechos esenciales de los venezolanos.
Durante los últimos años, Venezuela se ha visto inmersa en una severa crisis económica, política e institucional. En este contexto, las condiciones de vida han desmejorado notablemente. Los resultados de ENCOVI 2016 permiten vislumbrar que las condiciones de vida de 2017 seguirán en proceso de deterioro.