Actualmente, uno de los requerimientos para entrar a trabajar en alguna empresa es contar con experiencia laboral. Se preguntará: ¿cómo hacerlo? La respuesta es simple, y para esta ocasión Hilda Ruiz, coordinadora de Apoyo Estudiantil de la Escuela de Ciencias Sociales, brinda las opciones a tener presente para conseguir esa experiencia antes de la graduación.

PASANTÍAS

La opción más viable es hacer pasantías, asegura la también psicóloga. Estas sirven para observar la realidad y contrastarla con la teoría y la práctica. La experta agrega que actualmente suelen contratar a los pasantes por seis meses, con opción a renovar el contrato por seis meses más o, quizá, un año y, en el mejor de los casos, dejarlo fijo.

Cabe destacar que siempre es recomendable hacer la pasantía en una compañía reconocida, que brinde y enriquezca la experiencia. Hay que acotar que no cuesta nada llevar un café o un mensaje, pero que esto no se vuelva costumbre.

El pasante defiende los conocimientos que ha adquirido en la universidad, por lo que al entrar debe solicitarle a la empresa un cronograma de actividades, para saber cuáles serán las obligaciones y lo aprendido durante el período en la organización.

Por otro lado, el estudiante puede hacer cursos, lo cual es beneficioso porque lo mantiene actualizado; muchas veces más que el propio pénsum, y contribuye con su síntesis curricular, acota Ruiz.

Otra opción que destaca Hilda Ruiz, es emprender, porque es una manera de que el estudiante avance por sí mismo. «Esto también cuenta como una experiencia laboral», enfatiza. Desde luego, no hay que dejar que el deseo por conseguir una oportunidad laboral obstruya la verdadera meta: graduarse.

♦Luis E. Martínez