Stand Up Comedy es solo una manera más “a la moda” de decir comedia en vivo, show de entretenimiento que se hizo popular desde finales del siglo XIX. Pero ahora es parte de un movimiento cultural que ha llegado a los rincones de Caracas y hasta la Universidad Católica Andrés Bello.

El Stand Up Comedy de hoy día consiste en que el comediante se comunique directamente con el público, haciéndole recordar experiencias graciosas que tienen en común. Estudiantes, profesores y egresados de esta casa de estudio son parte de este movimiento. Algunos han ganado prestigio en las tarimas y otros en las redes sociales.

Uno de ellos es Kenneth Cayama, estudiante de sexto semestre de Ingeniería Industrial y quien se ha presentado en shows de Stand Up Comedy en esta casa de estudios, la Universidad Central de Venezuela, Universidad Simón Bolívar, Universidad Santa María, Teatro Bar, La Quinta Bar, el Circulo Militar y Chipis Burger, en el Centro Comercial San Ignacio. Cayama es un fiel seguidor de que:

La risa te hace ver la vida de una forma diferente

Comenzó haciendo Improvisación Teatral hace un año para superar el miedo escénico que lo atacaba antes de cada exposición. “Me daba mucha pena y en un año todo cambió”, explica Kenneth, que con esta iniciativa descubrió que simplemente le gustaba hacer reír a la gente.

Es lo máximo saber que por ti esa persona se está riendo y olvida sus malos días. Siento que la risa te hace cambiar todo

PROCESO CREATIVO DE CONTAR UN CHISTE

“Hacer llorar es más fácil que hacer reír”, de ahí la complejidad de construir un chiste efectivo y que haga reír a más de 100 personas. Un chiste está compuesto por tres cosas, describe Kenneth: una premisa, algo que puedas cuestionar y que sea graciosa; el complemento, una historia o anécdota que acompañe ese cuestionamiento; y el remate, dar la vuelta a lo que acabas de decir y finalizar con algo que nadie se espera para que estallen las risas.

El público siempre va a estar ahí y quiere escuchar cosas que le hayan pasado, mientras puedas atrapar su atención, ellos se van riendo

Kenneth suele recopilar sus vivencias, exagerarlas y agregarle cosas por las que el venezolano pasa en su día a día, y al finalizar su presentación termina con la siguiente frase:

La risa es un pedacito de dios en este mundo cruel

Porque siente que con la risa, pone una granito de arena para sobrellevar la situación que vive el país.

♦ Katherine González