El 31 de agosto de 1848 se publicó en la Gaceta de Venezuela el Decreto de Expulsión de la Compañía de Jesús de Venezuela, dictado por el general José Tadeo Monagas. El texto abría con el siguiente epígrafe: “Se prohíbe la entrada en el territorio de la República a los individuos de ambos sexos pertenecientes a la Compañía de Jesús, y se dispone que se hagan salir de él a los que se hayan introducido, o se introdujeren ocultando su carácter”.

Tal como señala María Soledad Hernández, la vida de la Compañía de Jesús en Venezuela comienza con la promulgación de un decreto “que expulsa a unos sacerdotes que no están en Venezuela”: los jesuitas estaban fuera del país desde que el rey Carlos III de España los echó de todas las colonias hispanoamericanas.

Ciento cincuenta años después, en 1916, se permitió el regreso al país de la Compañía de Jesús, un hecho que se atribuye a un acercamiento entre el Estado liberal y la institución eclesiástica. Así, el regreso discreto de los jesuitas se dio gracias a la autorización que Juan Vicente Gómez concedió a un pequeño grupo de sacerdotes que llegaron, en principio, para atender la formación sacerdotal.

No fue un regreso fácil ni exento de polémica, como explica el historiador Tomás Straka; de las congregaciones religiosas del país, “ninguna tenía el halo de polémica y temor que emanaba de la Compañía de Jesús”; pero los jesuitas superaron las reticencias y, con el paso del tiempo, han ido construyendo una sólida obra y un legado para Venezuela.

El libro Cien años en Venezuela. La labor venezolana de la Compañía de Jesús (1916-2016), editado por AB Ediciones con apoyo de la Fundación Konrad Adenauer, se dedica precisamente a revisar y comentar la huella de la labor jesuita en nuestro país.

Coordinado por  Tomás Straka, la publicación reúne siete artículos presentados originalmente como ponencias en las «XVI Jornadas de Historia y Religión», llevadas a cabo en 2016 en la Universidad Católica Andrés Bello.

La compilación no sólo es una memoria de ese encuentro académico, sino que se presenta también como parte de los gestos de conmemoración del centenario de la compañía jesuita en Venezuela.

El lector encontrará textos firmados por los investigadores María Soledad Hernández, Carmen Carrasquel, Abelardo Bazó, Marielena Mestas, Jaime Palacio, Manuel Donís Ríos y  Agustín Moreno Molina, que reconstruyen, describen y muestran una labor que comenzó en aquel 1916 con la administración del Seminario de Caracas y se expandió a otros ámbitos con la fundación de otras instituciones “esenciales para la restauración de la Iglesia como para la modernización del país” como el Colegio San Ignacio, la revista SIC, la Asociación Venezolana de Educación Católica (AVEC), la Universidad Católica Andrés Bello o Fe y Alegría, entre otras.

El libro está organizado en tres partes. La primera rearma esa historia, en plano general, desde aquella expulsión por Carlos II hasta la actualidad. La segunda rearma las condiciones que enfrentaron los jesuitas para regresar al país, las acciones políticas que emprendió la Iglesia venezolana para que los jesuitas volvieran, con foco en la actuación de Felipe Rincón González, y el rol de Salvador Montes de Oca en la defensa del grupo religioso, en la polémica con Nicomedes Zuloaga. La tercera parte revisa tres obras específicas de la Compañía de Jesús: la labor educativa en Guayana; la trayectoria de la revista SIC, a través de un análisis de sus editoriales; y los aportes a la sociedad venezolana de la UCAB.

Cien años en Venezuela… es un valioso aporte al recuento de parte de nuestra historia, le permitirá sacar una panorámica y obtener elementos para reflexionar sobre la contribución al país del grupo eclesiástico, así como volver sobre el papel de algunos de sus miembros representativos y revisar las obras desarrolladas en distintos ámbitos de la vida nacional.

Para obtener información sobre el libro están disponibles los números telefónicos de AB Ediciones (0212) 407.4187 y 407.4208, así como el correo electrónico [email protected].