Enseguida cundió cierto histerismo. La ignorancia sobre el origen de esa pieza hizo que muchos internautas se desbocaran haciéndole caso a lo primero que se les viene a la cabeza: sus prejuicios. En esos prejuicios se mezcla cierta inquina contra Evo Morales por parte de muchos venezolanos (quizás no sin razón). Fue un alboroto: decían en Twitter y Facebook que había que ver tan solo la cara de estupor o de franco enfado por parte del papa para darse cuenta del insulto o herejía que significaba tal regalo.

No es así, en realidad. La página web Oxígeno.bo trae la explicación (por cierto que su eslogan es curioso: “Periódico Vital de Bolivia”). En ella dice que Francisco recibió, en efecto, un crucifijo formado con el martillo y la hoz, símbolo comunista, de las manos del presidente Evo Morales en el Palacio de Gobierno. Luego de mencionar la alharaca formada en las redes, la nota del portal informativo explicó:

Lo que pocos saben es que el crucifijo es una réplica de aquella obra realizada por el fallecido sacerdote jesuita Luis Espinal, a quien el miércoles el papa rindió un homenaje en La Paz.

Oxígeno.bo entrevistó a quien actualmente posee el crucifijo original que hizo Espinal (como se ha dicho, al Papa se le regaló una réplica), el sacerdote Xabier Albó, reconocido investigador social y uno de los jesuitas con mayor arraigo en Bolivia. A él le pregunta el reportero de Oxígeno.bo cuál es el significado del crucifijo. Contesta:

Luis Espinal hace mucho que quería diálogo, diálogo y diálogo y esto lo expresó en su propio discurso cambiándole las tablas de la cruz por un martillo que era como la cruz y una hoz debajo.

Preguntado si es una referencia directa al comunismo, responde:

Nada que ver con eso de decir que [Luis Espinal] era comunista, de ninguna manera. Lo único a lo que apostaba Lucho era al diálogo necesario entre marxistas y cristianos, el necesario diálogo entre obreros mineros y cristianos. El martillo representa la fuerza de obreros y campesinos.

Mientras tanto, aquí mismito, en la UCAB, Jesús María Aguirre es consultado. En efecto, Albó es un antropólogo muy conocido, y fue probablemente el jesuita más cercano a Luis Espinal, quien fue asesinado durante la dictadura de Meza y Arce en la Bolivia de 1980. No confundir con el otro presidente Meza de la democracia de los noventa.

Aguirre, también jesuita, miembro activo del Centro Gumilla y profesor en la UCAB, recuerda que el nombre de Luis Espinal fue mencionado por el presidente Evo Morales nada menos que en el discurso de su primera toma de posesión y recomienda ver más información sobre Espinal en http://www.biografiasyvidas.com/biografia/e/espinal.htm.

Y precisamente a Espinal le dedicó Aguirre su artículo «Cambios en la política de comunicación de los jesuitas» en la revista Comunicación nº 169, pp. 60-63.

Aguirre añade unos apuntes sobre Albó:

En cuanto a Albó, es muy conocido por sus estudios de sociolingüística a nivel latinoamericano y mundial. Como varios jesuitas de Bolivia es de procedencia catalana y demás está decir con una alta sensibilidad por los problemas lingüísticos, particularmente de los indígenas. Tiene colaboraciones en SIC.

♦ Sebastián de la Nuez

Ver el premio que le otorgó LINGUAPAX a Xabier Albó en: http://www.linguapax.org/castellano/que-hacemos/premio-linguapax