La CIDH ha jugado un papel fundamental en el continente desde su creación en 1959, promoviendo el conocimiento sobre los derechos humanos y apoyando sus causas en los diferentes países. Es el principal órgano de expresión supranacional a las víctimas de DDHH en la región. “Ha reivindicado y protegido la dignidad de quienes no han encontrado verdad, justicia y reparación en sus países”, advierte el comunicado de la Asociación de Universidades Confiadas a la Compañía de Jesús, Ausjal, el cual está firmando por su máximo representante, Fernando Fernández Font.

El comunicado advierte sobre la situación precaria que atraviese esta Comisión por motivos financieros.

Ver comunicado aquí.