Si estudias Psicología, entonces, eres uno de los primeros en saber que no es tan fácil como, quizá, algunos afirmaban; si piensas estudiar esta fascinante carrera, prepárate. Usualmente, en esta profesión lo tradicional no siempre es una opción; es por ellos que te traemos cinco consejos que, de seguro, te servirán, mantendrán tu motivación elevada y no te caerás en la locura durante el transcurso en la universidad.

  1. Evita el «síndrome del paciente»: Esto se refiere a que no te identifiques con cada uno de los conflictos que tus pacientes te cuentan. Tampoco hagas el papel de doctor con tus amigos y conocidos. Antes de entrar a clases o sentarte a estudiar, procura dejar a un lado tus problemas. Recuerda, decidiste estudiar a la psicología, no que la psicología te estudie a ti. Aunque parezca lógico, muchas veces hay estudiantes que deciden incursionar en esta carrera porque creen que así podrán solucionar sus problemas personales y sociales. Esto es completamente falso.
  1. Deberás leer en abundancia: En la mayoría de las asignaturas, los profesores te pondrán a leer numerosas guías y diversos casos prácticos, por lo que debes sentirte cómodo y tener capacidad de realizar lecturas comprensivas. Recuerda que esta es una habilidad que con la práctica se mejora.
  2. Carga encima tus fichas de estudio: Hay que reconocer algo: la Psicología tiene términos que son complicados de memorizar. Los nombres de algunos trastornos, pueden producirte uno más grave y que no exista. Las fichas te permitirán agrupar y organizar toda esta información por términos de clase y facilitar su memorización.
  3. Consíguete un buen grupo de estudios: La Psicología es una carrea de naturaleza social, por lo que es recomendable que la practiques y estudies en grupo. Inicia debates con tus compañeros, profesores y comparte esta información con tus colegas. Además, estudiar en grupo evitará que caigas en la tentación de intentar identificarte con los rasgos que lees en el material de estudio.
  4. Mide tu progreso: No estudies todo a los golpes o por salir del paso. Haz ciertos descansos o paradas por pocos minutos; luego vuelve, repasa, recapitula y mide cuánto has progresado desde que empezaste a estudiar. También puedes hacer algún test para medir cuanto material has conseguido asimilar.

Procura seguir estos consejos y no solo conseguirás memorizar una mayor cantidad de material psicológico, sino que tu rendimiento en los exámenes y el conocimiento adquirido podrás retenerlo más tiempo en tu memoria y, quizá lo más importante, no terminarás en un psicólogo por culpa de tu carrera.

♦Luis E. Martínez