Acá te dejamos la otra mitad de actividades que puedes, o deberías hacer, ahorita en vacaciones.
Ir al Ateneo de Caracas. Recuerda que su nueva sede se encuentra en Urbanización Colinas de La Colina, en la avenida La Salle.
Ir a La Guaira y darte un buen baño de agua salada.
Subir a Galipán y comer un sándwich o hamburguesa de pernil y, desde luego, unas fresas con crema.
Ir a El Capitolio.
Conocer la historia en el Panteón Nacional.
Ir con tus panas a El León en La Castellana.
Recorrer el casco histórico de Chacao.
Conocer el Casco Histórico de Petare.
Ir a un partido de la Vinotinto o del Caracas Fútbol Club.
Tomarte un café en El Gran Café de Sabana Grande.
Subir a Los Teques por un golfeado con queso.
Acampar en El Ávila.
Visitar el Parque Los Chorros.
Comer en la Hermandad Gallega.
Tomarte un chocolate caliente en El Hatillo o en El Junquito.
Ir al Cuartel de la Montaña.
Tomarle una foto a la estatua de María Lionza y al mural de Zapata.
Ir a comer a La Cuadra Gastronómica de Los Palos Grandes, ubicada entre la 6ta transversal y la 3ra y 4ta avenida.
Comprar algo en algún mercadito de pulgas.
Ver jugar a los más pequeños en los chorritos de la plaza Los Palos Grandes o los de la plaza de Colinas de Bello Monte.
Escuchar a los cuentacuentos del Banco del Libro.
Visitar los jardines de la “Tierra de Nadie” en la UCV y, quizá, dormir un rato.
Capturar en fotos al camión de muñecas por la Plaza La Candelaria, en las tardes.
Escuchar el sonido de El Amolador. Llévale tus cuchillos.
Ir a algún PUB capitalino con tus panas.
Asistir a un show de comedia u obra teatral en el Teatro Bar, ubicado en Las Mercedes.
Visitar el Fuerte Tiuna.
Pasar por el Parque Boyacá, ubicado en la Calle Boyacá de El Rosal, una tarde; también puedes leer en su anfiteatro.
Descubrir los murales que adornan las diversas calles de Caracas.
Ir a un mercado de antigüedades.
Tomarte una chica en El Chichero, ubicado en la Plaza El Venezolano.
Montarte en el tren que va hacia los Valles del Tuy.
Visitar el mercado de El Cementerio y el Mercado de Guaicaipuro.
Comerte unos dulces en la Avenida principal de La Carlota.
Ir a comer en el puestico de mexicanos ubicado en El Cafetal.
Disfrutar de los grupos culturales los fines de semana en los pasillos de la UCV.
Ver una película en el Cine Urdaneta.
Tomarte un 3 en 1, jugo de naranja o merengada de cambur en Sabas Nieves.
Recorrer la cuadra de Las Novias en el Centro.
Visitar el mirador de La Cota Mil y el de Santa Fe.
Buscar un libro en la Biblioteca de Los Palos Grandes.
Disfrutar de un buen postre en la Plaza Bolívar de El Hatillo.
Ir a desayunar a la Feria de Los Palos Grandes.
Tomarte una cocada en La Guairita.
Ir a un concierto, cine foro o actividad cultural en La Hacienda La Vega.
Ir a algún local nocturno en Las Mercedes o en el Centro Comercial San Ignacio.
Beberte una bebida afrodisíaca en el puesto de la Avenida Bolívar.
Intercambiar libros en las plazas con los chicos de ReLectura.
Ir a escalar a las Cuevas de El Indio.
Ver y escuchar a la Orquesta Sinfónica.
Recorrer el famoso “laguito” del Círculo Militar.
Hacer yoga o tomarte una siesta en el jardín de PDVSA La Estancia.
Ir a comer hamburguesas en El Paraíso.
Visitar los zoológicos de El Pinar o de Caricuao.
Comerte una dona en la entrada de la Facultad de Enfermería de la UCV.
Visitar la Casa de El Libertador Simón Bolívar.
Recorrer las diversas colinas que tiene Caracas, tales como las de la Tahona, de Bello Monte, de Valle Arriba, de Vista Alegre, de la California… entre otras, para admirar las hermosas vistas y paisajes.
Jugar golf, paintball, manejar un carro rustico y hacer karting en San Antonio.
Ir al zoológico de contacto en El Hatillo
Hacerlo todo de nuevo, e invitar a sus amigos.
