Durante este semestre lleno de responsabilidades, quizás resulte difícil encontrar el tiempo necesario para emplearlo en el estudio de un segundo idioma. Por esta razón, el Centro para el Desarrollo de Lenguas Extranjeras (CDLE) de la UCAB propone incluir esta práctica dentro de la rutina diaria, mediante algunos hábitos que, sin duda, facilitarán el aprendizaje:
1. Estudiar diariamente: Según el psicólogo alemán Hermann Ebbinghaus, cuando el aprendizaje se distribuye a lo largo del tiempo, la información se retiene mejor que si se lleva a cabo en una sola sesión. Tomando esto en cuenta, la recomendación es estudiar por periodos de tiempo cortos pero de manera frecuente, eligiendo un horario que resulte cómodo y libre de distracciones.
En este sentido, el CDLE ofrece su asesoría a través de diferentes Classrooms de la plataforma Duolingo, disponibles para practicar inglés, alemán, francés, portugués, japonés, italiano y polaco de manera guiada.
2. Lograr una inmersión en el idioma: una estrategia para aprovechar al máximo el tiempo y los recursos, es que el idioma en estudio esté presente dentro de la rutina en todas las áreas posibles. Practicar mediante actividades gratificantes como escuchar música, ver series, películas, programas de TV, leer e incluso jugar videojuegos resulta muy efectivo.
Una investigación desarrollada por la Agencia de Educación, Audiovisual y Cultura de la Unión Europea determinó que los países en los que se proyectan películas con subtítulos tienen un mayor nivel de aprendizaje de un segundo idioma que aquellos donde se cuenta con un doblaje completo.
Esta técnica poco convencional, pero cada vez más reconocida, permite al estudiante familiarizarse rápidamente con la pronunciación correcta del idioma, mejorar la ortografía, conocer la gramática y ampliar considerablemente el vocabulario.
3. Tomar nota: adquirir el hábito de tomar notas es imprescindible para llevar un registro de lo que se ha aprendido. Según un estudio realizado por la Universidad de California, los apuntes deben tomarse con papel y lápiz, ya que los movimientos ejecutados al escribir están conectados con las funciones motoras del cerebro. Esto ayuda a reconocer las letras y establecer una conexión en su lectura.
4. Autoevaluarse: desarrollar esta costumbre permite a los alumnos hacerse conscientes de sus errores y establecer medidas que ayuden a reforzar los puntos débiles. Según Henry Holec, reconocido profesor de la Universidad de Nancy, en Francia, la autoevaluación es una “característica clave” de los estudiantes que asumen su propio aprendizaje.
5. Compartir el aprendizaje: El estudio en grupo resulta una buena manera de mantener la motivación. Además, cuando se trata de aprender idiomas, interactuar con otras personas es una excelente forma de desarrollar eficazmente las habilidades comunicativas.
Dentro de la oferta del CDLE, existen diferentes opciones que brindan la oportunidad de lograr esta interacción de manera sencilla, como los reconocidos clubes de conversación en inglés y francés y el programa Inmersión Dual Virtual.
Aunque no existe un camino corto para aprender idiomas, tomar en cuenta estos consejos ayudará al estudiante a acercarse progresivamente a la meta.
Para conocer más sobre los programas y herramientas de apoyo que ofrece el CDLE, se recomienda seguirlos en sus redes sociales en Instagram, Twitter y Facebook, o escribir al correo [email protected].
¡Bravo Génesis!
Está increíble.
Felicidades.