La universidad inauguró un aula tecnológica con el nombre del fallecido abogado, docente y activista gremial. El director del Instituto de Investigaciones Jurídicas, César Carballo, informó que pronto se conocerá el veredicto de un concurso de investigación en su honor, mientras el rector Arturo Peraza reflexionó sobre la importancia de reconocer los aportes de quienes ya no están, como una manera de mostrar «que siguen vivos entre nosotros»

Las autoridades rectorales y de la Facultad de Derecho de la UCAB inauguraron, este jueves 4 de abril, el aula tecnológica «Raúl Queremel Castro» (1927-2014), como homenaje a quien fue docente, juez y activista gremial.

El fallecido jurista también da nombre a un concurso de investigación jurídica instituido por la universidad, cuyo cercano fallo permitirá estrenar las instalaciones, que cuentan con equipos para el aprendizaje telemático.

El evento contó con la presencia en pleno de la familia Queremel, encabezada por la viuda Josefina Franco y el profesor de la UCAB, Luis Queremel, quien ofreció una detallada semblanza de la trayectoria de su padre en la judicatura.

César Carballo Mena, director del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UCAB, agradeció “la generosidad, compromiso y solidaridad” de las familias Queremel Franco y Queremel Milani, cuyo donativo permitió dotar apropiadamente los modernos espacios inaugurados en el segundo piso del edificio de Postgrado en Montalbán.

Asimismo, agradeció a las autoridades de la UCAB, que también decidieron refaccionar la sede del IIJ, que cumple 50 años.

Jesús María Casal, decano de la Facultad de Derecho de la UCAB,  señaló que esta institución se propuso rescatar a Queremel Castro «como una referencia para nuestros estudiantes».

«Esto lo consideramos fundamental  en estos tiempos en que tenemos que rescatar la ética de la profesión jurídica y dignificar, reconocer, la majestad de la tarea judicial que él llevó a cabo a lo largo de toda su vida», destacó el decano.

Agregó que el homenajeado «fue uno de los pocos jueces de carrera que cubrió desde los puestos iniciales hasta juez superior», al tiempo que se dedicó a la actividad gremial como presidente del Tribunal Disciplinario del Colegio de Abogados de Caracas.

Casal mencionó que también hizo aportes a las reformas legislativas, «pues como presidente de ese tribunal disciplinario se dictaron varias resoluciones que sirvieron de precedentes para crear importantes modificaciones en el Código de Enjuiciamiento Civil».

De paso, mostró satisfacción porque «hemos recuperado a Luis Queremel Franco como docente de ética en la Facultad de Derecho«.

En su turno, precisamente Luis Queremel Franco dijo estar muy emocionado al poder recordar los aportes profesionales y ciudadanos de su padre, fallecido hace justo una década.

Ofreció detalles desde que se graduó como abogado, «dos días antes de que Pérez Jiménez cerrara la UCV»  (1957); de su trayectoria en la que debió resistir obstáculos de carácter político, por su militancia partidista, y de su lucha por reivindicar, a través de diligencias judiciales, la restitución en un cargo del que había sido separado de manera irregular.

«Mi papá no sabía cobrar, regalaba sus servicios», dijo para significar el desprendimiento de quien, entre otras cosas, se ocupó en sus cargos públicos de luchar contra el retardo procesal mediante el desarrollo de una plantilla que agilizó las sentencias.

Como docente, el orador aseguró que su padre «está aquí, acompañando a la UCAB con sus enseñanzas, su genio, su cariño y amor al derecho. Estamos como estamos por falta de amor al derecho y la justicia«.

Para finalizar, el rector de la UCAB, Arturo Peraza, S.J., reflexionó sobre el regocijo que los creyentes sienten tras la Pascua de Resurrección y, del mismo modo, «al momento de recuperar la memoria del profesor Raúl Queremel y ponerla de nuevo en vigencia delante de la juventud, volvemos a emular lo que el espíritu hace: el espíritu resucita y hace que eso cobre sentido, de manera que le hable al presente y no solamente al pasado«.

«Esto es volver a traer a la vida a alguien y volverle a decir: tú estás vivo en el espíritu, porque Dios no da la vida en el espíritu y volvemos a reconocer que sigue vivo entre nosotros y eso es lo que tenemos que celebrar, que hay mucha gente que sigue viva entre nosotros y que por eso este país no se ha caído. Sí es verdad, están todos los atropellos que estamos viendo, pero este país no renuncia a la democracia, este país no renuncia a la república, a las ganas de volver a la ciudadanía, y lo consigues en la calle, en las conversaciones, en el modo en que la gente va viendo las situaciones. Y nos volvemos a decir: necesitamos reencontrarnos como nación, necesitamos reconstruir los puentes de ciudadanía», señaló el rector en sus palabras.

Queremel: una trayectoria por el Estado de derecho

En la sala inaugurada este 4 de abril quedó instalada una placa conmemorativa donde se lee que Raúl Queremel Castro estudió en la Universidad Central de Venezuela, donde se graduó de abogado en 1951, donde también se graduó como doctor en Ciencias Políticas.

Como juez ocupó los cargos en los juzgados Tercero de Parroquia del Departamento Libertador, Primero del Departamento Libertador y Superior Séptimo Civil  y Mercantil de la Circunscripción Judicial del Distrito Federal y Edo. Miranda.

Queremel Castro fue miembro fundador de la Asociación de Jueces  del Distrito Federal y Edo. Miranda y en 1985 recibió su jubilación.

Fue secretario de la Junta Directiva del Colegio de Abogados del Distrito Federal y presidente de su Tribunal Disciplinario y fue corredactor del Código de Ética del Abogado Venezolano.  Ejerció la docencia  como profesor de Prácticas de Procesal Civil en la UCV y la Universidad Santa María.

♦Texto: Elvia Gómez/Fotos: Manuel Sardá